madrid - La ministra de Economía y Empresa en funciones, Nadia Calviño, afirmó ayer que el Gobierno español, “desde el primer día”, había expresado su compromiso con la revalorización de las pensiones en función de la evolución del IPC con el fin de asegurar el mantenimiento del poder adquisitivo de los más de 9 millones de pensionistas. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Calviño subrayó que el Ejecutivo quiere garantizar pensiones “dignas” ahora y en el futuro, por lo que las pensiones deben subir con arreglo al coste de la vida.
En este sentido, la ministra lamentó que el Pacto de Toledo no alcanzara un acuerdo en la anterior legislatura, pero añadió que en cuanto se inicie la siguiente el Gobierno del PSOE pondrá en marcha esta comisión parlamentaria, en la que espera recibir el apoyo del Parlamento para revalorizar las pensiones conforme al IPC.
Sin alarmismos Por otra parte, la ministra pasó revista a la situación económica de crecimiento del PIB español pero a menores tasas que en los meses precedentes y aseguró que pese a la citada evolución a la baja “no corresponde caer en el alarmismo” respecto a la desaceleración de la economía española, ya que se espera que siga creciendo -aunque a menor ritmo- mientras no se produzca “una perturbación impredecible”. Nadia Calviño reconoció que la economía española está muy abierta y no será inmune a una prolongación en el tiempo de las tensiones comerciales globales o a una ralentización mayor de la economía europea, pero insistió en que no cabe adoptar una posición catastrofista ni alarmista.
La ministra no quiso confirmar si el Gobierno revisará a la baja su previsión de crecimiento económico para este año, fijada en el 2,2%, aunque ha dicho que si hay que hacerlo se hará, pero siempre bajo un criterio de prudencia.
Sobre la actualización del cuadro macroeconómico que se está preparando, explicó que tendrá en cuenta la revisión a la baja de la serie histórica de PIB realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), así como los últimos datos económicos que se están recibiendo. Interrogada por la influencia que la economía pueda tener en el votante después de que el PP haya pedido retrasar el debate electoral hasta que se conozcan el paro de octubre, la ministra rechazó el uso electoral de la información. - Europa Press