doha - La retirada de Catar, el mayor exportador de gas del mundo, para el próximo 1 de enero de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no tendrá un gran impacto por su escasa producción de crudo, según analistas consultados ayer por Efe. Catar ha sido miembro de la OPEP desde su creación en 1961, siendo el primer país de Oriente Medio en unirse al cartel y ahora el primero en salir, por lo que es una “decisión histórica”, según el experto económico catarí y colaborador en diferentes publicaciones locales, Mohamed Shuaed.
El emirato supone “solo el 2% de lo que producen los países pertenecientes al cártel, cuya producción supone entre el 30% y 33% del mercado global”, afirmó. El ministro de Energía catarí, Saad al Kaabi, anunció ayer en Doha la decisión, cuyo objetivo es tener independencia y poner en práctica sus planes de aumentar la producción de hidrocarburos. Las autoridades se quieren centrar en el gas, diversificar sus inversiones y ganar autonomía en su política de hidrocarburos, según el ministro, quien admitió el interés de su país en aumentar también la producción de crudo.
Abdalla Al Khater, presidente del grupo de inversiones catarí Al Amal Global investment, comentó ayer a Efe que este paso llega en “un buen momento”, dado que “es importante” que Catar se centre en el gas.
Catar es el mayor exportador de gas natural del mundo, con cerca de 128.645 millones de metros cúbicos por año, según datos de la OPEP. El pequeño emirato, el menor de los quince miembros de la OPEP por área y población, tiene reservas probadas de 23,8 billones de metros cúbicos, sólo superado por Rusia e Irán.
Además, pretende construir un gran complejo petroquímico, que previsiblemente será inaugurado en 2025 e incluirá la mayor planta de craqueo de etano de Oriente Medio, con capacidad para procesar 1,6 millones de toneladas anuales, según previsiones de Qatar Petroleum. Los expertos consultados coinciden en que la salida de Catar del bloque podría causar un efecto dominó en la organización de países exportadores, pudiendo ser Irán el próximo país en reflexionar sobre su pertenencia en la OPEP. - Efe