BILBAO. Según se desprende de este barómetro, el 86,6% de los vascos encuestados reconoce incluso "modificar sus hábitos de consumo" para reducir su gasto mensual.
Del mismo modo, la eficiencia se ha convertido en el factor más importante durante la elección de compra ya que, para el 80% de los vascos, es el "principal motivo para conseguir un ahorro económico". En el ranking a la hora de elegir un aparato de calefacción, agua caliente y aire acondicionado le siguen aspectos como la relación calidad/precio (55,3%) o el ruido (43,3%).
Sin embargo, a la hora de justificar esta consideración, el ahorro económico que supone decantarse por soluciones eficientes se impone a su contribución por el cuidado del planeta (75,8% frente 52%), hasta el punto de que las emisiones de CO2 y NOx del aparato no serían un "condicionante" a la hora de comprar una caldera o calentador de agua para el 52% de los encuestados.
A la hora de equipar sus hogares en busca de la mayor eficiencia, la caldera mural individual es la solución predominante en el País Vasco para el suministro de calefacción (56%), seguida de la calefacción central comunitaria (22,7%).
Respecto al calentamiento de agua caliente sanitaria, la caldera mural individual (45,3%) vuelve a ser el aparato con más presencia en los hogares vascos, seguido del agua caliente central comunitaria (17,3%).
CONECTIVIDAD, ASIGNATURA PENDIENTE
El auge del Internet de las Cosas (IoT) hace que, poco a poco, sean más los aparatos domésticos que se pueden controlar a través de un Smartphone. Una tendencia que está transformando también el sector de la climatización residencial, ofreciendo nuevas oportunidades de confort y eficiencia a los usuarios. Sin embargo, según el barómetro, los vascos no se han decidido a dar el salto a estas nuevas ventajas, ya que el 89,3% aún no puede controlar la climatización de su hogar desde el Smartphone.
Además, el estudio también arroja que solamente un 21,3% de los encuestados se plantearía cambiar sus aparatos por otros más conectados.