madrid - Las empresas contrarias a los acuerdos suscritos con los sindicatos de estibadores mantienen contactos con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y con las autoridades europeas para tratar de hacer frente a esos pactos que, en su opinión, incumplen la última reforma del sector. Según fuentes empresariales, esas empresas que han abandonado la patronal Anesco están sopesando los próximos pasos y aún no han tomado una decisión definitiva sobre las medidas que adoptarán.

La Plataforma de Inversores en Puertos Españoles (PIPE), que agrupa a muchas de ellas, ha pedido reiteradamente amparo a las autoridades nacionales y europeas al considerar que los acuerdos suscritos con los sindicatos no respetan la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) ni el real decreto ley de reforma de la estiba aprobado por el Congreso.

La PIPE ha explicado que esta situación no es nueva y que en 2009 la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar, sindicato mayoritario entre los estibadores, y Anesco ya fueron sancionados por la CNMC por la firma de otro acuerdo. Según la PIPE, ese acuerdo “no respetaba los principios de libre competencia” y las empresas tuvieron que adherirse a él “bajo coacción”.

En el caso actual, la PIPE denunció en su día que los acuerdos suscritos con los sindicatos eran resultado de “una campaña de acoso a las empresas”, ya que los estibadores decidieron hacer huelga solamente en las que no aceptaban sus planteamientos.

Según publicaba ayer el diario El Economista, el comité de PIPE tiene previsto reunirse la próxima semana para analizar la situación. En relación a este asunto, por otro lado, el PSOE exigió ayer al ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, que desarrolle cuanto antes el reglamento del decreto ley de la reforma de la estiba para reflejar en él las condiciones del acuerdo alcanzado entre patronal y sindicatos del sector. Así, el portavoz de Fomento de los socialistas en el Congreso, César Ramos, instó al ministro a “evitar perder un minuto más y que la situación se vuelva a complicar”. “Le pedimos que salga de su despacho y se siente en la mesa a negociar con patronal y sindicatos el reglamento”, señaló.

El diputado denunció que la actitud del Gobierno, no reconociendo el acuerdo alcanzado en marzo por patronal y sindicatos, “ha supuesto pérdidas millonarias para la economía española, que se podrían haber evitado si hubieran hecho su trabajo y no se hubieran puesto de perfil”. “El ministro ha tardado tres meses en reconocer el acuerdo alcanzado entre patronal y sindicatos el pasado 29 de marzo. Si lo hubiera hecho ese mismo día y se hubiera puesto a trabajar para cerrar los flecos pendientes, no se hubieran producido pérdidas millonarias como consecuencia del conflicto”, dijo. - Efe/Europa Press