madrid - Los sindicatos de estibadores presentaron ayer en la mesa de negociación con la patronal de las empresas de estiba, Anesco, y el Gobierno español una contrapropuesta en la que hacen especial hincapié en que se garantice la subrogación de los trabajadores del colectivo que trabaja en la carga y descarga de los buques en los puertos a las compañías privadas, y para ello quieren que dicha disposición se incorpore al documento legal que establece la liberalización del sector en los muelles españoles en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea de 11 de dicimbre de 2014.
En opinión de los estibadores, el documento que presentó el Gobierno español hace referencia a “la continuidad en el empleo de los actuales trabajadores portuarios, a través de los mecanismos de subrogación que en su caso se acordaran...” pero como no se fían a la vista de los mensajes que se les ha mandado desde fuentes cercanas a las empresas que abogan por desregular el sector para rebajar sus condiciones laborales, quieren que el pase desde las actuales Sagep a las empresas privadas quede bien atado. Esta es una condición básica, según los trabajadores, para que pueda alcanzarse un acuerdo.
En la contrapropuesta, los estibadores plantean flexibilizar el plan de prejubilaciones planteado por el Gobierno español, para que no dependa solo de la edad del trabajador. Asimismo, mantienen sobre la mesa que exista un registro de trabajadores portuarios.
Ante las críticas gubernamentales sobre la supuesta falta de competitividad de los puertos del Estado, los estibadores esgrimen los datos de la consultora internacional británica Drewry Shipping Consultants que señala que en la estiba y desestiba de los contenedores, el coste medio de los puertos del Estado es de 63,1 euros por TEU frente a los 83,9 euros de Alemania o los 81,3 euros del Reino Unido. Solo los mayores puertos de Europa, los de Holanda tienen un coste ligeramente inferior, 62,5 euros.
Los sindicatos de la estiba presentes en la mesa de negociación (Coordinadora, CCOO, UGT, CIG y USO) plantearon esta respuesta en la reunión a tres bandas que mantuvieron en la tarde de ayer con la patronal Anesco y el Gobierno representado por el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, y el secretario de Estado de Empleo, Juan Pablo Riesgo, todo ello en presencia del mediador en la negociación, el presidente del Consejo Económico y Social (CES), Marco Peña. Los estibadores señalan que no se oponen al cumplimiento de la sentencia judicial europeo pero piden garantías para sus empleos y condiciones laborales. Mientras tanto el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, llegó a cuestionar el carácter democrático del voto en el Congreso de los Diputados, -donde una mayoría legal y democrática rechazó la convalidación del decreto ley gubernamental-, al afirmar que espera que “hayan oído” el mensaje “unánime” de la sociedad en contestación al no a la reforma de la estiba.
Subrogación. Los 6.150 trabajadores del colectivo de estibadores quieren que la subrogación quede plasmada en el decreto del Gobierno.
Registro. Los trabajadores insisten en que se cree un registro único de estibadores .
Productividad. Las empresas quieren establecer una nueva organización de trabajo que permita aumentar la productividad.
Prejubilaciones. El Gobierno ofrece un plan de prejubilaciones voluntarias a partir de 50 años con el 70% del salario