madrid - El Gobierno aprobará mañana el incremento fiscal sobre las bebidas azucaradas con gas, el alcohol y el tabaco, y descarta aumentar los impuestos a los hidrocarburos. El nuevo gravamen a las bebidas con alto contenido en azúcar ya se lleva a cabo en la Generalitat y países como el Reino Unido ya lo aplican como medida para reducir el consumo de azúcar por motivos de salud. Está previsto que este nuevo tributo aporte a las arcas del Estado cerca de 200 millones de euros.
Entre los impuestos especiales también se grava el alcohol y el tabaco. Respecto al primero, la medida no afectará a la cerveza y el vino, que ya tienen su propios tributos, por lo que los afectados serán las bebidas destiladas (como el whisky, la ginebra o el vodka, entre otros).
hidrocarburos Para el tabaco se seguirán las directrices europeas y se eliminará el doble mínimo -utilizado para evitar que el tabaco se venda por debajo de un determinado precio-, y aumentará su gravamen. Por último, el Gobierno descarta aumentar la presión fiscal sobre los hidrocarburos.
Este nuevo decreto preparado por el Gobierno del PP, que incluye también una reducción de incentivos fiscales para las grandes empresas en el impuesto de Sociedades y medidas de lucha contra el fraude fiscal, prevé aportar unos 8.000 millones a las arcas públicas en 2017 para cumplir con el objetivo de déficit al 3,1% en 2017 marcado por Bruselas. - Efe/E.P.