Gasteiz - El constructor vasco de material ferroviario CAF presentó ayer su oferta para optar al contrato por importe de unos 2.600 millones de euros para suministrar al operador español Renfe, dos series de 15 trenes de alta velocidad de última generación, y el correspondiente mantenimiento hasta un máximo de 40 años.
Este es el mayor contrato ferroviario en los últimos diez años de Renfe, muy condicionado por la reducción de inversiones por efectos de la crisis. Y más allá del material rodante es clave el mantenimiento pues supone para el ganador garantizarse unos ingresos fijos en los próximos años de casi 1.800 millones de euros.
Renfe ha impuesto unos criterios de fabricación y financiación muy específicos que han sido aceptados por CAF, Talgo, Alstom, y Siemens pero no así por Hitachi, (Ansaldo) y Bombardier que tras impugnar el pliego de condiciones ayer no presentó oferta. El grupo canadiense considera que la condición de fabricar el tren en España le perjudica especialmente ya que el modelo de tren que quiere presentar es una variante del Zefiro producido en Italia.
El hecho de que Renfe prime la construcción en el Estado español no significa que CAF y Talgo partan con ventaja porque Alstom tiene una importante fábrica en Catalunya y Siemens también puede realizar el pedido en territorio español.
El fabricante vasco CAF ha puesto toda la carne en el asador para intentar hacerse con el contrato mediante su nuevo modelo Oaris. La obtención del contrato de Renfe supondría para CAF el espaldarazo definitivo de su asalto a la Alta Velocidad ferroviario y le abriría la posibilidad de competir en los mercados exteriores también en este segmento.
CAF ya ha logrado un primer contrato para la plataforma Oaris en Noruega. Con hasta ocho coches podrá transportar el mayor número de pasajeros que exige Renfe para esta serie de AVE, hasta 400. Según los pliegos, la operadora busca un tren con capacidad para circular a una velocidad de hasta 320 kmh.
Australia. CAF confirmó ayer un contrato para suministrar y mantener durante 20 años 14 tranvías en un proyecto que incluye la construcción de una nueva línea de tren ligero en Camberra (Australia). La firma forma parte del Consorcio Metro Camberra, junto con Cimic-ACS, Pacific Partnerships, John Holland, Mitsubishi, Aberdeen CPB, Deutsche Bahny el Banco de Tokio