BILBAO. Blasco señaló ayer en Bilbao que sus hijos "están permanentemente en portales de empleo en internet y ni se les pasa por la cabeza apuntarse en Lanbide para buscar un empleo, entre otras cosas porque poco se encuentra ahí".

El viceconsejero, cuya dimisión han pedido EH Bildu y PSE-EE, ha matizado hoy sus declaraciones al asegurar que no pretendió menospreciar al organismo, "que desarrolla sin duda una formidable tarea en un momento de dificultades enormes".

El consejero vasco de Empleo, Ángel Toña, ha admitido que la declaración de su viceconsejero fue "desafortunada", pero ha considerado que su intención era "enfatizar" lo que "todavía queda por hacer" en el servicio vasco de empleo.

En un comunicado, el sindicato ELA ha considerado "inaceptables" y "preocupantes" las declaraciones del viceconsejero "pues podrían ser la antesala de la privatización de servicios como la orientación o la intermediación laboral, el empeoramiento de las condiciones laborales de la plantilla y la consecuente decadencia de la calidad misma del servicio vasco de empleo".

El sindicato ha explicado que como "forma de denuncia" de la situación que se vive en Lanbide ha optado por abandonar la mesa técnica del organismo, al igual que han hecho los sindicatos UGT, CCOO y LAB.

Fuentes sindicales han señalado que los representantes de estas tres centrales, firmantes en septiembre pasado del acuerdo que fija la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de Lanbide, se han levantado de la mesa por efecto de las declaraciones del viceconsejero.

En su comunicado, ELA ha considerado "inaudito" que Blasco "subraye la ineficacia del servicio de empleo vasco como si de un mero usuario se tratase cuando es el responsable directo de ésta situación como viceconsejero de Empleo".

Para este sindicato, es cada vez más evidente que el acuerdo que suscribieron LAB, CCOO y UGT con el Gobierno Vasco "supuso un cierre en falso del conflicto de Lanbide y no ofrecía garantía alguna respecto a las condiciones laborales de la plantilla ni respecto a la calidad del propio servicio ofrecido a la ciudadanía".

Según ha indicado, el acuerdo "únicamente sirvió para desmovilizar a la plantilla con falsas expectativas" y desde su firma ELA ha denunciado que el Gobierno Vasco "ha despedido a 24 trabajadores" y que "se están tomando decisiones organizativas nefastas sin negociación alguna con la representación sindical".

"Con la cobertura del texto acordado en septiembre, el Gobierno está aprovechando para imponer decisiones que solo ahondan en el caos organizativo que preside las oficinas de Lanbide", ha advertido el sindicato, que ha optado por abandonar la mesa citada para denunciar esta situación.