GASTEIZ - El dinamismo de las exportaciones industriales vascas está amortiguando el impacto negativo del bajo precio del petróleo en las ventas de energía y permite que el comercio exterior vasco esté en niveles similares a los del récord del año pasado. Las compañías han exportado entre enero y septiembre bienes por valor de 16.225 millones de euros, una cifra similar (-0,9%) al registro del año pasado.

El desfase es inapreciable, apenas 150 millones, que son aproximadamente las ventas exteriores que realizan el conjunto de empresas vascas en poco más de dos días. Es en definitiva una cifra que podría corregirse con relativa facilidad en los tres meses que quedan para cerrar el año, porque no hay ningún síntoma de desaceleración en las exportaciones de las empresas vascas.

Todo lo contrario, en los nueve primeros meses del año las empresas vascas han exportado casi 800.000 toneladas más que en el mismo periodo de 2014. El problema es que un tercio del total de las toneladas exportadas son petróleo y sus derivados, básicamente la producción de Petronor en Muskiz, que se venden a un precio significativamente inferior al de hace un año.

De hecho, hasta septiembre se han exportado cerca de 680.000 toneladas más de petróleo, que al precio de hace un año habrían engordado en más de 500 millones de euros el volumen total del comercio exterior vasco. En realidad se vende más debido a que la materia prima está más barata y el refino lo asimila en su precio, pero la cuenta da medida del papel que está jugando la caída del precio del barril de crudo dentro de las exportaciones de Euskadi. Del mismo modo, el empuje del sector industrial se pone de relive en su capacidad para absorber casi en su totalidad el efecto negativo de las ventas energéticas. Si no se contabilizara el impacto de la energía, las exportaciones crecerían algo más de un 1%. El motivo es que el principal segmento exportador de la CAV, los bienes de equipo, roza hasta septiembre unas ventas de 6.000 millones de euros, con un incremento del 4%.

por territorios Ese vigor permite que las exportaciones de Gipuzkoa, donde están instaladas el 80% de las fábricas de máquina herramienta del Estado, hayan crecido un 3,20% en los que va de año. Mientras que Araba (-2,2%) y Bizkaia, que retrocede un 3% precisamente por el peso de Petronor en su economía, inclinan la balanza en sentido contrario y el saldo final registra un ligero retroceso de menos de un punto porcentual para el conjunto de la CAV.

Volviendo al análisis por sectores, las semimanufacturas, el segundo segmento en ventas, retrocede un 3,4%, pero el incremento del sector del autómovil (5,5%) tapa prácticamente todo el agujero.

Al margen de la energía, el resto de sectores tienen un impacto muy limitado y las subidas en bienes de consumo duradero, otras mercancías y materias primas, compensan número arriba o abajo las caídas de alimentación y bebidas y manufacturas de consumo.

La energía es el epígrafe que cae con más fuerza y que determina el signo negativo de las exportaciones respecto a hace doce meses. Las ventas han caído en más de 350 millones de euros. Justo la mitad son imputables a los productos petrolíferos y muy cerca (-143 millones) están las exportaciones de gas, cuya cotización está directamente ligada al precio del crudo.

destino de los bienes En cuanto al país al que llega la exportación, Francia sigue siendo el principal comprador de productos vascos, registra un crecimiento de las compras del 5% y gana terreno a Alemania, el segundo destino, que retrocede ligeramente (-1,3%). Estados Unidos (2,3%), Reino Unido (6,9%) y sobre todo Italia (21%) han aumentado sus compras y completan las cinco primeras posiciones del ránking. Esos países reciben algo más de la mitad de las ventas exteriores de las empresas vascas y crecen en conjunto algo más de un 4%.

Mientras tanto continúa el retroceso en los países con problemas, como China o Brasil. En casa, el frenazo de la economía holandesa se suma a la debilidad de Alemania, que empieza a despertar, y las exportaciones a la eurozona bajan algo más de un 5%.

En el otro lado del espejo del comercio exterior, las empresas vascas han comprado bienes por valor de 12.640 millones de euros en los nueve primeros meses del año. Se ha registrado un retroceso del 3,5% también a causa de la caída del precio del petróleo. Si se eliminan los productos energéticos, las importaciones del resto de sectores crecen casi un 14%, lo que pone de relieve el dinamismo de la actividad económica vasca.

La dependencia energética de Euskadi implica que es precisamente el petróleo el producto que más peso tiene en la cesta de la compra internacional de las empresas. De ahí que el saldo final sea negativo.

¿A quién compran las empresas vascas? Como ocurre con las exportaciones, Alemania y Francia están a la cabeza, si bien cambian posiciones. Reino Unido es el tercer país en el ránking de importaciones.