Bilbao - El mercado laboral vuelve a dejar una de cal y una de arena en el panorama vasco. La CAV fue en marzo la única comunidad autónoma del Estado en la que creció el número de parados inscritos en los servicios públicos de empleo. Pero en el lado positivo, la afiliación a la Seguridad Social sigue al alza, lo que afianza una tendencia más halagüeña. El pasado mes se computaron 11.825 cotizantes más que un año antes en los tres territorios. Así lo revelaron los datos publicados por el Ministerio de Empleo y el servicio vasco de empleo, Lanbide, ayer.

Bizkaia fue el territorio que peor parado salió el pasado mes en lo que al paro se refiere. Sumó 695 desempleados más a las listas de Lanbide. Dato que no pudo contrarrestar Gipuzkoa, donde se contabilizaron 194 parados menos frente a febrero. En Araba hubo 9 parados más. Nafarroa fue el territorio que mejor se comportó en este apartado, con 622 desempleados menos. A nivel estatal se vivió el mayor descenso del paro en un mes de marzo de los últimos trece años, con 60.214 personas inscritas menos, especialmente gracias al impulso de los sectores relacionados con el turismo, con la Semana Santa mediante y la hostelería tirando del carro.

La CAV cuenta pese a esos datos no tan positivos del mes de marzo con 6.743 desempleados menos registrados en listas que hace un año -concretamente 3.146 en Bizkaia, 2.748 en Gipuzkoa y 849 en Araba- mientras que Nafarroa suma 3.997 menos. En España son 343.927 parados menos en doce meses. Aún con esa evolución, los tres territorios tienen 171.405 desempleados inscritos y Nafarroa 48.427. En España son 4.451.939 los registrados en los servicios públicos de empleo.

Si nos fijamos en el dato de la afiliación a la Seguridad Social, la evolución es más positiva. Tal y como destacó ayer el director general del Lanbide, Adolfo Alustiza, la CAV tiene ahora 11.825 personas más afiliadas a la Seguridad Social que hace un año. Nafarroa por su parte cuenta con 5.440 cotizantes más en esos doce meses. En el conjunto del Estado hay 536.512 trabajadores más afiliados al sistema que en marzo de 2014. Un crecimiento que apunta a un cambio de tendencia en un mercado que en los últimos años se veía abocado a destruir empleo y que parece que empieza a crearlo.

Ahora, aunque cambia lentamente y conviene fijarse también en el tipo de contratos que se firman, la tendencia empieza a ser distinta. Por eso Alustiza señaló ayer que ya se aprecia una “moderada” recuperación, “más lenta” pero “más sólida” y “más consistente”. A su juicio, estamos ante una “recuperación más compacta, más consistente” que además “genera empleo de mayor calidad en Euskadi que en el resto del Estado”.

Por su parte, la directora gerente del servicio navarro de Empleo, María Isabel García Malo, destacó que los datos ofrecidos ayer apuntan a una “consolidación de la tendencia a la baja de los datos interanuales”, en lo que a paro se refiere. Unos datos “que ya acumulan año y medio de reducción ininterrumpida” en la comunidad foral.

Alustiza añadió que, atendiendo a “los datos económicos”, la tendencia positiva que ya se aprecia “se va a ir afianzando” a medio plazo. El director general del Lanbide subrayó que “se ve una clarísima relación entre el crecimiento del PIB, crecimiento de la economía y generación de empleo”, por lo que en los próximos meses la recuperación del mercado de trabajo será más consistente gracias a la evolución de la economía que se pronostica. Precisamente, el lehendakari, Iñigo Urkullu, amplió las previsiones de crecimiento de la CAV al 2,3% la pasada semana, por lo que se espera un mayor dinamismo de la economía en los próximos trimestres,

Y eso que según el máximo mandatario de Lanbide el sistema productivo vasco es diferente al del Estado por el mayor peso que aquí tiene el sector industrial. Una rama en la que la estacionalidad no tiene repercusión como en la de servicios y a la que “es más difícil acceder”. Por ello en la evolución del mercado laboral vasco se pueden producir “variaciones” respecto a la del Estado, como ese aumento del paro del pasado mes, y por eso mismo los datos y la evolución del “mes que viene pueden ser totalmente diferentes”.

Contratación En marzo se formalizaron un total de 65.418 contratos en la CAV y 25.537 en Nafarroa. Ello supone un incremento del 23,4% y del 20,05% con respecto a un año antes, respectivamente -y de un 14,93% y un 17,17% respecto a febrero-. Aunque, eso sí, la mayoría de los contratos suscritos en marzo fueron temporales: un total de 59.696 en la CAV y 24.082 en Nafarroa.

De hecho, solo 5.722 de los nuevos contratos de la CAV y 1.455 de los de Nafarroa fueron indefinidos. Esto es, el 8,74% de los firmados entre Araba, Gipuzkoa y Bizkaia y el 5,69% de los suscritos en Nafarroa. En España esa cadencia es similar. En ese tercer mes se firmaron 1.441.775 contratos: 1.297.484 temporales y 144.291 indefinidos, el 10%. La precariedad sigue ganando terreno.

Según Alustiza si “algo se debe evaluar como negativo” es precisamente “la temporalidad y la calidad del empleo”. “Es el dato que más nos preocupa, porque es algo que incide muy directamente en la vida de las personas, en su capacidad de hacer un proyecto de vida, en absoluto nos satisface”, insistió.