“2014 ha sido un año claramente mejor de lo esperado”. El crédito al consumo de bienes duraderos creció de forma notable el pasado año. Los préstamos para comprar vehículos, muebles, electrodomésticos, entre otros, experimentaron un incremento del 8,25%, según datos de la asociación nacional de establecimientos financieros de crédito al consumo (Asnef), dados a conocer ayer.

El presidente de esta asociación, Óscar Cremer, explicó que durante 2014 se afianzó el crecimiento iniciado tímidamente el año anterior. Según su explicación, ese dato “nos hace ser moderadamente optimistas de cara al futuro”, pero siempre con prudencia, porque “no estamos en un escenario exento de riesgos”. En 2014 se concedieron préstamos por valor de 21.713,5 millones de euros. Fue con ello el segundo año consecutivo que mejora esta actividad tras cinco ejercicios anteriores de caídas continuas.

Según Cremer, las familias españolas ya tienen más confianza en el futuro y por ello tienen menos miedo a endeudarse para adquirir bienes de consumo. Y es que según argumentó, la mejora económica hace que las familias del Estado tengan más renta disponible debido al leve crecimiento del empleo que ya se ha dado y al incremento de la riqueza financiera de los hogares. En definitiva que la repetida salida de la crisis que reflejaban los datos macroeconómicos se empieza a notar. Pero el dirigente también asumió que en el incremento se percibió la influencia de los planes PIVE que han servido para abaratar la compra de vehículos y estimular de esa forma ese mercado.

De hecho, la venta de coches creció notablemente en 2014, incrementando los créditos destinados para ese fin, ya que, según Asnef, casi el 80% de los vehículos que se compran en España se financian. Los datos ofrecidos ayer indican que en 2014 la financiación destinada a la compra de coches subió un 18%, hasta 6.895 millones de euros. En ese campo destacó el incremento de la financiación de turismos nuevos, que creció el 20% con respecto a un año antes y sumó 5.627,8 millones. Otros 1.112 millones se destinaron a financiar turismos usados, un segmento que creció el 9,54%, mientras que la financiación de vehículos comerciales se redujo el 31,66%, porque estos no contaron con planes de financiación como el PIVE, según la asociación Asnef.

Mientras, los créditos al sector consumo -que engloba tanto el gasto en tarjetas de crédito como en bienes de consumo y préstamos personales- crecieron un 4%, hasta los 14.818 millones. Dentro de esta actividad, las compras con tarjeta de crédito se elevaron el 2,20%; las de bienes de consumo lo hicieron el 7,74% y los préstamos personales, el 20,82%.

Desde Asnef se insistió además que la inversión viva, es decir, los créditos que estaban en vigor a 31 de diciembre de 2014 y no solo los concedidos a lo largo de ese año, crecieron por primera vez en ocho años. Lo hicieron el 4,85%, hasta los 23.159,1 millones de euros.

Desde la asociación también se destacó el recorte de la morosidad registrado en 2014, de unos tres puntos básicos, que hizo que, en automoción, los impagos bajaran al 7,77% -desde el 11,36%-, y, en consumo, al 8,52% -desde el 11,26% del ejercicio anterior-.