- El catedrático de Economía y Estrategia de la London School of Economics, Luis Garicano, se ha mostrado favorable a que en el Estado se comience a ligar la prestación del subsidio de desempleo con la realización de cursos de formación y el rechazo de las ofertas de trabajo como ocurre en los países del norte de Europa para romper esas bolsas de parados, sobre todo entre los jóvenes, que no tienen como objetivo intentar incorporarse al mercado de trabajo.
Garicano hizo este planteamiento como solución a la situación del paro juvenil en el Estado que ronda el 53,8%%, y que es el más alto de toda Europa, durante su intervención ayer, en el desayuno de trabajo organizado por la sociedad de garantía recíproca Elkargi, ante una nutrida representación de los empresarios guipuzcoanos.
En su análisis sobre el mercado laboral en el Estado, Garicano se mostró de acuerdo con la reforma laboral en lo que ha supuesto de ruptura del modelo de la negociación colectiva, aunque fue muy critico por no haber resuelto el corsé de la contratación y de no haber sido capaz de hacer desaparecer la dualidad entre los contratos fijos y temporales y la preeminencia de éstos sobre los primeros.
El prestigioso economista, que reconoció que formó parte del grupo de asesores a los que el expresidente Zapatero, pidió consejo para la puesta en marcha de la reforma laboral impulsada por su gobierno, se mostró favorable a la reciente propuesta del BBVA del sistema indenmizatorio mixto para el despido de los trabajadores con el fin de favorecer la contratación indefinida. En lo que se refiere a la situación económica de Europa, Garicano aseguró que los países de la UE se enfrentan a “un problema de estancamiento económico a largo plazo y con un riesgo cada vez mayor de que se produzca una deflación”. La japonizacion de la economía europea parece que cada vez es más clara ante la ausencia de una política monetaria que estimule y dinamice al mercado por parte del BCE para aumentar los precios y las inversiones y, con ello, la inflación. “El BCE tiene que hacer algunas cosas poco ortodoxas para evitar que Europa entre en deflación”, sentenció Garicano.
Entre los factores que están influyendo en la desaceleración del crecimiento económico de Occidente, a juicio de Garicano, se encuentran el endeudamiento, el factor demográfico dirigido al envejecimiento y al descenso del progreso tecnológico, ya que el actual está teniendo una menor influencia en el ser humano que los adelantos que se produjeron a partir de la revolución industrial.
Por su parte, el presidente de Elkargi, Josu Sánchez, señaló que ante el actual escenario de incertidumbre económica, es imprescindible encontrar “fórmulas que posibiliten, de manera rápida y eficaz, tanto la reactivación de la actividad empresarial como el impulso a la inversión pública” y, con ello, “propiciar una nueva política industrial de la que surjan apoyos decididos a la empresa vasca”.