Gasteiz - El Parlamento tumbó ayer el intento de UPyD por acercar la polémica de las tarjetas opacas a la esfera económica vasca y cuestionar la política de retribuciones en las cajas de ahorro de la CAV. PNV y PSE hicieron valer su mayoría en el Legislativo para dejar sin efecto el intento del partido magenta de iniciar una investigación que determine si en Euskadi se han repetido los hechos acaecidos en Caja Madrid y Bankia, una propuesta que nace, según admitió el único aforado de esta formación en Euskadi, Gorka Maneiro, sin “ninguna prueba”.
Aún así, el pupilo de Rosa Díez afirmó desde el atril parlamentario, a la vista del nulo éxito de su iniciativa, que trasladará a la Fiscalía su demanda para que investigue si en algunas de las tres entidades financieras cuya fusión alumbró Kutxabank existieron casos de tarjetas black. En su argumentación, Maneiro defendió que al igual que el resto de cajas del sistema financiero estatal, las entidades vascas también han estado dirigidas por “los políticos que las parasitaron”.
Frente a estos argumentos, PNV y PSE rechazaron la “utilización” de los debates que se desarrollan en la Cámara vasca con el objeto de “extender sospechas y prevenciones”, en este caso, sobre los profesionales de Kutxabank.
El tono crítico con el que tanto Josune Gorospe (PNV) como Txarli Prieto (PSE) respondieron a la propuesta de Maneiro también estuvo presente en la intervención del PP. Desde la bancada conservadora, Anton Damborenea, quien se abstuvo en la votación, afeó al aforado de UPyD su intento de “ponerse medallas” y le instó a dirigirse a los juzgados para realizar las pertinentes denuncias. EH Bildu, representada por Igor López de Munain en este punto, apoyó la iniciativa de UPyD y votó en contra la enmienda del PSE. - A.A.