Bruselas - El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, respaldó ayer las decisiones tomadas por el Banco Central Europeo la semana pasada para rebajar los tipos de interés e inyectar liquidez al sistema bancario como "una contribución muy poderosa" para contribuir al crecimiento y el empleo, pero instó a los gobiernos europeos a persistir en las reformas y el control del gasto.

"Las decisiones del BCE la semana pasada son una contribución muy poderosa de política monetaria a los esfuerzos para el crecimiento y por tanto la creación de empleo. La acción determinante del BCE es un reconocimiento del trabajo fuerte que se ha hecho en toda la Unión Europea en otros ámbitos, especialmente en la consolidación fiscal y reformas económicas", defendió Barroso durante el arranque del Foro Económico de Bruselas.

"Esto frecuentemente se subestima. El progreso en la consolidación fiscal, las reformas estructurales y las garantías institucionales no sólo tienen mérito en sí, sino que crean las condiciones para la posición política del BCE", dijo, insistiendo con todo en la "plena independencia" con la que cada institución toma sus propias decisiones.

Eso sí, Barroso avisó a los gobiernos europeos de que "los ciudadanos quieren resultados, quieren ver que sube el empleo y el crecimiento" y recordó que la Comisión Europa les ha apuntado el camino para apuntalar la recuperación económica a través de sus recomendaciones específicas para cada país.

"Los estados miembros deben jugar ahora su parte para aplicar las reformas", aunque se trate en ocasiones de decisiones difíciles a nivel político, defendió el exprimer ministro portugués, que saludó las decisiones "valientes" de Portugal, que le han permitido salir con éxito del programa de rescate. "España también ha salido con éxito del programa para su sector financiero", dijo.

"No las impone" Barroso advirtió del riesgo de que "por falta de determinación para continuar las reformas" también provocado por "la inestabilidad política" se pongan "en riesgo algunos de los logros" para salir de la crisis hasta ahora. En todo caso, Barroso insistió en que los gobiernos europeos se tienen que responsabilizar de estas reformas y ajustes y rechazar la idea de que las "impone" Bruselas. "Esto simplemente no es verdad", aseguró, tras recordar que la Comisión propone sus recomendaciones a los países y luego es el Consejo Europea el que "puede o no" adoptarlas.

El jefe del Ejecutivo comunitario ha vuelto a defender en la necesidad de promover la consolidación fiscal y la inversión dirigida a la creación de empleo. - Efe