bilbao - Ya había avanzado el consejero de Empleo, Juan María Aburto, que mayo sería un punto de inflexión para la curva del paro en Euskadi. Y se han cumplido las previsiones ya que el importante crecimiento de la afiliación a la Seguridad Social, esta vez sí, ha ido acompañada de un notable descenso de las personas inscritas en Lanbide. Los 3.200 desempleados menos dan cuerpo a la primera caída sólida del paro registrado este año, tras una Semana Santa descafeinada, a las puertas de un segundo semestre que según el Gobierno Vasco debe situar en verde las estadísticas de manera más o menos estable.
El mes pasado fue bueno en todos los sentidos para el mercado laboral vasco, con un aumento de la afiliación a la Seguridad Social por encima de los 4.500 trabajadores, lo que deja el balance de lo que va de año en positivo. En mayo había 876.400 cotizantes en la CAV, un millar por encima de los que había al final de 2013. La comparación interanual, por primera vez en la crisis, arroja un saldo positivo, con 1.316 afiliados más que en mayo del año pasado. Desde octubre de 2008 no se había registrado un incremento interanual de la afiliación en la CAV, un dato que por sí solo habla de un incipiente cambio de tendencia en el empleo, aunque sigue siendo pronto para afirmar que la mejoría llega para quedarse.
Es la primera vez que se produce un aumento interanual, pero la afiliación ha encadenado ya varios meses en positivo. Febrero, marzo y abril, además de mayo, registraron subidas de la ocupación en Euskadi, si bien hasta ahora los nuevos empleos no eran suficientes para absorber a todas las personas que se incorporaban al mercado de trabajo. Ni siquiera lo fueron en abril, un mes en el que se recuperaron 2.000 ocupados de la mano de la Semana Santa pero apenas bajó el paro en 75 personas.
La situación ha cambiado en mayo, como ya adelantaba el consejero de Empleo en una entrevista a mediados del mes pasado con este diario, en la que vaticinaba un descenso del paro ese mismo mes con una profundización de esa mejoría en los siguientes. El balance a estas alturas del año sigue sin ser bueno en lo que hace referencia al paro registrado, sobre todo por el batacazo de enero, aunque ahora queda suavizado. El descenso de 3.206 desempleados en mayo equivale al 1,8%, apenas medio punto por debajo del producido en el conjunto del Estado español, una buena comparativa para Euskadi teniendo en cuenta que en las últimas estadísticas de empleo la economía vasca se estaba situando a la cola entre las comunidades autónomas. De hecho, en los últimos doce meses Euskadi presenta la bajada del paro más modesta de entre todas las autonomías.
Mayo suele ser un buen mes para el empleo, a caballo entre la Semana Santa y las nuevas contrataciones de verano, por lo que dada la proximidad de la campaña turística no es de extrañar el descenso del paro en los servicios. Sin embargo, este sector, el de mayor peso en la economía, ve reducir el desempleo un 1,27%, menos que la industria y la construcción, que con 700 y 600 desempleados menos ven reducirlo un 4,5 y un 9,5%, respectivamente. En mayo se sellaron 64.000 contratos en la CAV, un 18,7% más que en abril y un 13,8% más que en mayo de 2013. Los contratos indefinidos, más de 4.000, prácticamente se duplican respecto a mayo de 2013.
Por territorios, el paro baja en 1.666 personas en Bizkaia, en 964 en Gipuzkoa y en 576 en Araba. También van mejor las cosas en Nafarroa, que sigue reduciendo el paro a un ritmo mayor que el de la CAV. En mayo fueron casi 1.600 navarros menos en paro, un 3,13% menos, un descenso mayor que el del Estado, mientras que se crearon cerca de 2.500 empleos.
Desde la patronal vasca se valoraron positivamente las cifras dadas a conocer ayer por el ministerio de Empleo, y se subrayó que los datos confirman "la progresiva recuperación del mercado laboral". En cambio, los sindicatos aprecian todavía muchas sombras y denuncian que el empleo que se ha creado ha sido en base a más precariedad. "Se pretende generar un escenario en el que la gente que trabaja y la que no trabaja sean personas que están en una situación de empobrecimiento general", lamentó Mikel Noval, de ELA.
4,5 millones en el estado El Gobierno español vio reforzado su discurso triunfalista ayer al dar a conocer un nuevo descenso del paro en el Estado de 111.900 personas, lo que supone la bajada más pronunciada en un mes de mayo desde el inicio de la serie histórica en 1996. El total de parados contabilizados en las oficinas de empleo se sitúa ligeramente por encima de los 4,5 millones.
La afiliación creció en 198.000 trabajadores, el mejor dato desde 2001 a excepción de mayo de 2005, año en que se regularizó la situación de inmigrantes de manera masiva. Sin duda el turismo vuelve a tirar de la economía española, así como las medidas del Gobierno del PP para abaratar la mano de obra. La tarifa plana de 100 euros de cotización a la Seguridad Social ha contribuido a generar 68.000 contratos desde finales de febrero, una medida polémica y de duración limitada que contribuye a cargar sobre los hombros de la Seguridad Social la debilidad del mercado laboral español.