bilbao - Las haciendas de Bizkaia y Gipuzkoa remontaron vuelo en abril. Tras el bache de marzo para el conjunto de la CAV, ambas administraciones registraron notables repuntes en su recaudación. La Diputación vizcaina ingresó el mes pasado 1.990 millones de euros por impuestos concertados, 137 millones más que en abril de 2013, un 7,4%. Las arcas guipuzcoanas recibieron 871 millones, con un incremento del 9% (105 millones). A falta del dato de Araba, que en el primer trimestre arrastraba el peor comportamiento, la recaudación en la CAV vuelve a crecer y alivia tensión en el horizonte de salida de la crisis.

El motivo es que el volumen de recaudación de la hacienda alavesa supone menos del 15% del total de Euskadi y el saldo global será positivo sea cual sea el comportamiento de Araba. El crecimiento registrado en abril está muy vinculado a los ajustes con el Estado y al fin de las devoluciones del caso Rover. También continúa aumentando los ingresos por retenciones de trabajo en el IRPF básicamente por la mayor presión fiscal para las rentas más altas introducida en la última reforma. El IVA es otro de los tributos en los que se registran avances.

El Impuesto de Sociedades continúa en cambio a la baja, si bien las diputaciones confían en que se estabilice a lo largo del año para cerrar el ejercicio en positivo.

Precisamente, otro mensaje compartido por las dos haciendas que ayer hicieron públicos sus datos fiscales es la necesidad de esperar hasta agosto para tener en la manos una fotografía más ajustada a la realidad de la salud financiera de la CAV. La campaña del IRPF acaba de iniciarse y la del Impuesto de Sociedades se cerrará en agosto. Sin esas dos piezas, el puzzle fiscal está incompleto y no se percibe la imagen de forma nítida.

Con todo, aunque Bizkaia y el Gobierno Vasco prefieren esperar para hacer una valoración oficial, las administraciones vascas ven con otros ojos una variable que se percibía como un posible foco de problemas hace un mes. La amenaza no se ha despejado del todo, pero parece ahora más lejana. Gipuzkoa sí mostró públicamente un moderado optimismo para asegurar que "estos buenos resultados reflejan la influencia de la lucha contra el fraude y la elusión emprendida" por la Diputación de Bildu.