bruselas - La recuperación económica española empieza a tomar cuerpo aunque, a tenor de las previsiones macroeconómicas de primavera presentadas ayer por la Comisión Europea, esta evolución positiva no se dejará sentir, al menos tanto como promete el Gobierno de Mariano Rajoy, en el empleo. España crecerá algo más de lo anunciado en febrero pasado, un 1,1% en 2014 (una décima por debajo de lo que augura el Gobierno) y un 2,1% en 2015 (tres décimas por encima), pero insuficiente para hacer que la tasa de desempleo baje de manera significativa. Lo hará al 25,5% este año (25,7% en su anterior pronóstico) y al 24% a finales de 2015 (24,6%). Por tanto, Bruselas estima que este año habrá 137.000 desempleados más de los calculados por Rajoy y, en 2015, 160.000 más.
Es decir, en sintonía con el resto de la eurozona (crecerá un 1,2% en 2014 y un 1,7% en 2015), habrá una ligera recuperación, que podría ser mayor si las condiciones de financiación mejoran más rápido de lo previsto o peor si las economías emergentes como las de América Latina se desaceleran más de lo esperado. En todo caso, será con menos empleo y unos números rojos que podrían desbocarse de nuevo el próximo ejercicio y poner en aprietos al Gobierno si decide eliminar la subida temporal de impuestos, como pretende hacer Mariano Rajoy a escasos meses de las elecciones generales de 2015.
"Hay señales positivas en lo económico pero por supuesto la situación de España sigue siendo grave, especialmente en materia de empleo", advirtió ayer el vicepresidente y comisario de transportes, Siim Kallas, que sustituía por primera vez en rueda de prensa a Olli Rehn, de baja para hacer campaña europea. Kallas apuntaba así al principal problema de la economía española y ponía en evidencia el optimismo de un gobierno que confía cerrar el año, según el programa de estabilidad presentado el pasado viernes, con una tasa de parados del 24,9% para reducirla al 23,3% en 2015 dentro de una estrategia que, estiman, les permitirá crear 600.000 empleos de aquí a finales del próximo año. Sin embargo, los cálculos de Bruselas dejan el paro por encima de lo estimado por el PP. En concreto y según la última Encuesta de Población Activa (EPA), deja el total de parados en 137.000 más este año, y en 160.000 más en 2015.
"Lo importante es que la Comisión Europea dice que España va a crecer el próximo año por encima de la media europea y va a crear más empleo que la media. Ese es el mensaje y es positivo", se limitó a valorar ayer el ministro de Economía, Luis de Guindos, a su llegada a la reunión del Eurogrupo apuntando a una tasa de empleo que mejorará un 0,4% este año y un 1,2% el que viene (del 0,4 y 0,7% en la eurozona) aunque sin efectos llamativos sobre el paro.
El nuevo escenario macroeconómico, que servirá a Bruselas para elaborar las recomendaciones por país que presentará el próximo 2 de junio, también cuestiona la evolución de las cuentas públicas. La deuda se disparará por encima del 100% (100,2% en 2014 y 203,8% en 2015) y si bien el déficit se mantendrá este año dentro de los objetivos pactados con la Unión Europea, con un desvío del 5,6% frente al 5,5 anunciado por el Gobierno, la Comisión avisa que podría volver a descontrolarse. De hecho, si no hay nuevos ajustes y si el Gobierno, de cara a las elecciones del próximo año, sigue con su plan de eliminar la subida temporal de impuestos que expira a finales de año, como la del IRPF, el déficit público podría volver a dispararse hasta el 6,1% en 2015, casi dos puntos por encima del objetivo pactado (del 4,2%) y junto con el de Chipre, el mayor de toda la eurozona.
Es decir, o hay nuevas subidas de impuestos o el Gobierno tendrá que apretarse todavía más el cinturón y hacer más recortes. Las únicas pistas que avanzó De Guindos en este terreno es que el Ejecutivo aprobará una reducción de impuestos con un IRPF nuevo que "no tendrá nada que ver" con el actual y que supondrá "una reducción de la carga fiscal para los contribuyentes", indicó ayer antes de la reunión.
Al igual que el BCE, Bruselas también descarta el riesgo de deflación en la eurozona aunque España registrará una contención de precios preocupante, del 0,1% este año, aunque se elevará al 0,8% el próximo año. El análisis augura también que el sector de la construcción continuará contrayéndose en 2014 y advierte que el acceso de las pymes a la financiación sigue siendo excesivamente costoso.
PIB. El Ejecutivo comunitario aumenta en una décima, hasta el 1,1 % del Producto Interior Bruto (PIB), el crecimiento de la economía española prevista para este año en comparación con sus últimas proyecciones de febrero pasado, y cuatro décimas el de 2015, hasta el 2,1 %.
Empleo. La CE asegura que el empleo crecerá más rápido en 2014, llevando a una caída moderada del paro hasta el 25,5%, para bajar al 24 % en 2015.
Déficit. La Comisión considera que España cumplirá este año el objetivo de déficit con dos décimas de margen (un 5,6 % frente al 5,8 % establecido), pero advierte de que el desfase volverá a aumentar hasta el 6,1 % del PIB en 2015.