MADRID. Pese a la caída de ventas por la crisis, "creemos que en España hay mucho potencial", ha afirmado hoy el director general de la compañía en el país, Ignacio Sánchez Villares, durante la presentación de la estrategia "omnicanal" de Leroy Merlin, que financiará su expansión con fondos propios.
"Hemos pasado por unos años complicados, pero desde junio vemos una clara recuperación del consumo. El inicio de año está siendo muy positivo, aunque el mercado sigue siendo complicado", ha subrayado el directivo, quien ha apuntado que, no obstante, confía "muchísimo" en España en los próximos diez años.
"Este país tiene muchísimo potencial, hay que creérselo y apostar por él", ha aseverado Sánchez Villares, quien ha explicado que las nuevas aperturas se centrarán en grandes superficies y ha dicho que hay "grandes oportunidades" en zonas como Galicia, Madrid, Cataluña o Castilla y León.
La compañía también estudia abrir locales en el centro de las ciudades, aunque por el momento no ha decidido ninguna apertura porque los alquileres siguen muy altos y complican la rentabilidad.
El objetivo de Leroy Merlin, ha apuntado, es cubrir el cien por cien del territorio nacional y que todo ciudadano tenga una tienda a menos de una hora de su casa, así como que las más de 200.000 referencias con las que trabajan estén disponibles "online" en 2018.
Para ampliar la tienda en internet, que actualmente ofrece 35.000 referencias, permitir que el cliente compre "lo que quiera, donde quiera y cuando quiera" y reducir los plazos de entrega, la firma invertirá en nuevas tecnologías 54 millones de euros.
El año pasado, la empresa, que cumple 25 años en el país, facturó en España 1.506 millones de euros, cifra que supone un incremento del 3,5 % respecto a 2012 y que se sitúa en niveles de 2007, lo que, a juicio de Sánchez Villares, refleja que ha resistido bien la crisis.
Actualmente, cuenta en el país con 56 grandes almacenes y 2 tiendas de proximidad en 15 comunidades autónomas, a los que este año sumarán dos locales, uno en Badajoz y otro en Tamaraceite (Las Palmas de Gran Canaria).
Por sus tiendas pasaron el año pasado 44 millones de visitantes, según Sánchez Villares, quien ha explicado que la firma emplea a 8.000 personas, cuenta con una cuota de mercado del 12 % y el año pasado bajó el precio de 18.000 productos (el equivalente a 22 millones de euros).
El directivo ha destacado la apuesta de la compañía por los fabricantes nacionales y ha asegurado que el 75,6 % de las compras que hizo Leroy Merlin en 2013 correspondieron a proveedores españoles, que, además, exportaron a tiendas del grupo fuera de España productos por valor de 300 millones de euros.
Esta cifra podría elevarse a 1.000 millones en los próximos ejercicios porque "tenemos unos fabricantes excepcionales", ha apuntado el director general de Leroy Merlín en España.