MADRID. El organismo estadístico ha explicado que este descenso del coste por hora trabajada se debe al mayor número de horas trabajadas porque la Semana Santa cayó en su mayor parte en el primer trimestre.

Así, eliminando los efectos estacionales y de calendario, el coste por hora trabajada presentó un descenso interanual del 0,3% entre abril y junio, frente al 0,5% del trimestre precedente.

Con el retroceso del segundo trimestre, el coste por hora trabajada retorna a tasas negativas tras el aumento del 2,2% experimentado en el primer trimestre.

Por su parte, la tasa de variación del segundo trimestre sobre el primer trimestre para la serie de datos desestacionalizada y corregida de calendario muestra una caída del coste por hora trabajada del 0,1%.

Sin eliminar el efecto calendario y la estacionalidad, la mayor parte de las actividades económicas registraron descensos en sus costes durante el segundo trimestre del año y sólo el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (+4,5%), las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento (+0,7%) y actividades inmobiliarias (+0,5%) se situaron en terreno positivo.

El mayor descenso del coste laboral correspondió a las industrias extractivas, con un descenso del 6,8%, seguidas de las actividades sanitarias y de servicios sociales (-5,6%) y la educación (-4,7%).

Corregido el efecto calendario y la estacionalidad, los mayores retrocesos del coste por hora trabajada se dieron en las industrias extractivas (-3,6%) y las actividades sanitarias y de servicios sociales (-3,4%).

Por otro lado, el INE ha revisado los datos provisionales del Indice de Coste Laboral Armonizado correspondientes al primer trimestre de 2013. La tasa de este periodo, corregida de efectos de calendario y desestacionalizada, se situó en el -0,5%.

Los resultados del ICLA se envían trimestralmente a Eurostat para su posterior publicación, cumpliendo el requerimiento estadístico establecido en el plan de acción de la Unión Monetaria Europea (UEM).