A trece días de que la Comisión Europea (CE) decida sobre la devolución de las ayudas fiscales al sector naval español, los astilleros vascos empiezan ya a perder sus primeros pedidos. Casi al mismo tiempo que el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, abría ayer un rayo de esperanza al señalar ahora que hay "margen para modificar las decisiones" del colegios de comisarios que se reunirá el próximo día 17, astilleros Zamakona -radicada en Santurtzi- remitía a los integrantes del Foro Marítimo vasco una comunicación interna en la que daba cuenta del "bloqueo" de varios bancos nacionales de dos contratos firmados.

Es un anticipo de la situación a la que está abocada el sector si finalmente se consuma la sanción de Bruselas, ya que aún en el caso de que la devolución no corriera a cargo de los astilleros sino, como propone Almunia, de los armadores y financieros, la medida ahuyentará a los inversores y terminará estrangulando a los astilleros. En la comunicación enviada por correo electrónico y a la que ha tenido acceso este diario, el presidente de Zamakona señala que los dos contratos pendientes de entrar en vigor, cuentan -o quizás cabría decir ya, que contaban- con avales aprobados por importe de 60 millones de euros más el tax lease "que nos han sido denegados hasta que se haga pública la decisión de Bruselas". Añade que sus clientes extranjeros con los que estaban en conversaciones para futuras operaciones han dejado "en suspenso" sus posibles pedidos hasta que no haya una resolución firme del caso.

Es un secreto a voces que la alargada sombra de Holanda se esconde tras este conflicto. Se la señala como la impulsora y beneficiaria principal si el expediente abierto contra el tax lease prospera. La nota de Zamakona también hace una referencia a la intromisión holandesa y confirma las sospechas. "Hoy me comunica un armador nacional al que hemos ofertado cuatro barcos remolcadores para el mar Caribe que, sintiéndolo mucho, los barcos se construirán en los Astilleros Damen, de Holanda, dada la situación del tax lease".

Entre los muchos destinatarios de la comunicación figura el propio Almunia. En el texto se refiere al eurocomisario responsabilizándole de convertir a España en el "balneario de Europa".

Almunia dice ahora que hay "margen" para replantear el expediente de devolución de las ayudas, ya que "la decisión está incluida en la agenda del colegio de comisarios del día 17" pero se podría replantear "en la medida en que haya argumentos para que ese margen pueda ser utilizado", explicó.

Con un discurso menos tajante que apenas 24 horas antes, el comisario admitió ayer que hasta que no haya decisión del colegio hay margen para que Bruselas se replantee su postura pero dejó claro que eso solo ocurrirá si España presenta nuevos argumentos jurídicos. "Hay margen en el sentido de que hay tiempo para discutir", precisó. "En la medida en que haya nuevos argumentos jurídicos hay que tenerlos en consideración, por supuesto, en la medida en que no los haya no habrá razones para mover la situación de donde está", zanjó.

El comisario no dio, sin embargo, ninguna pista sobre dónde puede estar el punto de encuentro para solventar el enfrentamiento que desde hace dos años mantienen España y la CE por las ayudas al sector naval. Tampoco quiso aclarar si existe alguna posibilidad de limitar la retroactividad de la decisión de recuperación de las ayudas al momento en que se abrió el expediente formal contra España, en el año 2011, y no desde abril de 2005 como plantea su propuesta.

Con todo, el exministro de Trabajo sí dio muestras de que no quiere pasar a la historia como el político que hundió el sector, como le acusan miles de trabajadores, e insistió que espera "nuevos argumentos jurídicos" aunque admite "no es una cosa de esperar o desear" sino "como dijo el Santo llamado Tomás hay que verlo para creerlo", apuntó.

El político bilbaíno no quiso ahondar en la polémica sobre la reunión solicitada para el pasado miércoles por el ministro de Industria, José Manuel Soria, y varios presidentes autonómicos, entre ellos el lehendakari Iñigo Urkullu y que finalmente no tuvo lugar. Confirmó no obstante que habló por teléfono el martes por la tarde con Soria, dos presidentes autonómicos y los dos secretarios generales de los principales sindicatos españoles y que está dispuesto a recibirles la próxima semana. Según trascendió ayer, el comisario ha citado en Bruselas a Soria, Urkullu y el resto de presidentes autonómicos afectados a una reunión el próximo 11 de julio a mediodía.

No todos están de acuerdo con el análisis que hace el comisario. Según explicó ayer en los micrófonos de Onda Vasca la eurodiputada del PNV, Izaskun Bilbao, la dirección general de Competencia también tendría que tener en cuenta la carta remitida a Noruega por la excomisaria Neelie Kroes, en marzo de 2009, en la que apuntaba que el tax lease era legal.