MADRID. De esta cifra, cerca del 80,97 % de esta política, 6.203,91 millones de euros, se destina a la regulación de los mercados agrarios, un 2,6 % menos.
Por su parte, el presupuesto de gastos del Estado para el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) en su totalidad, suma 1.680,15 millones, un 25,4 % menos que en 2012.
Para el programa de desarrollo rural sostenible, dedica 20,27 millones de euros, un 30,9 % menos, mientras que para desarrollo del medio rural recoge 1.007,76 millones, un 33,7 % menos.
De esta forma, sumados ambos capítulos de desarrollo rural, se prevé una dotación global de 1.028,03 millones de euros.
Para competitividad y calidad de la producción y los mercados agrarios gastará 39,45 millones (-37,3 %); en competitividad y calidad de las sanidad agria, 47,3 millones (-15,5 %) y para competitividad de la industria agroalimentaria y calidad alimentaria, 28,70 millones de euros, un 7 % menos.
Al medio marino y pesca se destinan 62,29 millones de euros, para la mejora de las estructuras y mercados pesqueros (48,49 millones, -17,8 %), y la protección de los recursos pesqueros (13,81 millones, -29,8 %).
De igual forma, figuran las dotaciones destinadas a la política de regadío, 47,24 millones de euros (-10,8 %) y las destinadas a la previsión de riesgos en las producciones agrarias y pesqueras (204,9 millones de euros, -18,9 %).
Según destaca el Gobierno, el objetivo de las políticas de este presupuesto es hacer frente a los retos de la Política Agraria Común (PAC) en cuanto a orientaciones sectoriales, a las crecientes inquietudes medioambientales y a las exigencias de calidad de las producciones y procesos.
A estos fines añade los relativos a la necesidad de realizar adaptaciones en determinados sectores para asegurar su supervivencia en algunas zonas de nuestro país.
Por su parte, las subvenciones a la producción agraria, que cuentan con aportaciones de los Fondos Europeos Agrícolas de Garantía (Feaga), pretenden evitar que los precios en origen desciendan por debajo de determinados límites y que los precios al consumo superen cotas no deseables, procurando que la oferta se adapte a la demanda.
En concreto las transferencias agrícolas y pesqueras a España serán en 2013 de 7.327,65 millones -frente a los 7.634,87 millones de 2012, es decir un -4,02 %-, de las cuales 5.958,46 millones corresponden a las ayudas directas a los agricultores de la PAC (fondos Feaga); 1.155,19 millones son fondos europeos Feader o de desarrollo rural, y 214 millones otros (FEP, FEOGA-O, IFOP y otros).