marid. El Congreso de los Diputados aprobó ayer el proyecto de ley de la reforma laboral con 46 enmiendas, entre ellas la que limita a un año la prórroga automática de los convenios colectivos y la que pone fecha de caducidad al contrato para las pymes y los emprendedores si baja el paro.
La comisión de Empleo del Congreso de los Diputados aprobó, con competencia legislativa plena, el proyecto de ley de la reforma laboral, que ahora será enviado al Senado, que está previsto que nuevamente lo devuelva al Congreso en junio para su aprobación definitiva.
El texto salió adelante con los 25 votos a favor del PP y de CiU; votaron en contra PSOE, Izquierda Plural, UPyD, PNV, Geroa Bai y BNG (en total 17).
De las 46 enmiendas incorporadas, el PP introdujo 16 en el trámite de la ponencia y otras 30 las pactó ayer con el resto de grupos, entre las que destacan 17 con CiU y siete con el PSOE.
Mientras que las acordadas con CiU tocan a aspectos fundamentales de la reforma, las transaccionadas con el PSOE se centran en la racionalización de los horarios laborales o en la empleabilidad de los discapacitados.
El PP ha pactado con CiU que el contrato indefinido para emprendedores y pymes de menos de 50 trabajadores -fija un período de prueba de un año en el que no hay indemnización por despido- desaparezca si baja el paro al 15% frente a la tasa actual del 24,4%.
También ha acordado con los nacionalistas catalanes que los tres trimestres consecutivos de caída de ingresos o ventas que permiten despedir por causas económicas se comparen con el mismo período del año anterior, así como los dos trimestres que permiten a un empresario dejar sin efecto (descuelgue) lo pactado en convenio.
CiU y PP también se han unido para aumentar del 5% al 10% (180 horas) la jornada que puede modificar un empresario para incentivar la contratación de familiares de los autónomos y de fijos discontinuos y para que tratamientos como el cáncer no se tengan en cuenta como causa de despido por absentismo. En cuanto al absentismo, se amplía el cómputo de faltas para el despido, según lo acordado con CiU, que ahora deberán superar el 5% de las jornadas hábiles durante el año, lo que se traduce en 12 o 13 ausencias en un año, frente a las ocho iniciales.
Además, quedan excluidas las bajas por tratamiento de enfermedades graves, como el cáncer. Anteriormente, la ponencia de la Comisión de Empleo ya había acordado incorporar una veintena de enmiendas del PP y otras tres pactadas por esta formación con UPyD para extender a las víctimas del terrorismo los beneficios en materia de contratación que se aplican a las de violencia de género y a discapacitados. Otra enmienda destacada que se introduce, esta vez pactada con Foro, es que la ultraactividad -prorroga automática de los convenios una vez que han expirado y no hay acuerdo para su renovación- se limite a un año, como pedía la patronal, en vez de a los dos que recogía el texto original.
Protestas de la oposición El debate de ayer comenzó con las protestas de la oposición -salvo CiU- porque el PP repartió, minutos antes del inicio, el texto de las 27 enmiendas, lo que les impedió conocerlas en profundidad. El presidente de la comisión, José Eugenio Azpiroz, aplazó el inicio una hora y luego la oposición le pidió que la suspendiese hasta hoy, lo que no aceptó por la urgencia y necesidad de la reforma.
Los partidos de la oposición, salvo CiU, coincidieron en el debate en denunciar que la norma laboral no generará empleo, da todo el poder al empresario y acaba con la negociación colectiva. Además, con CiU se han negociado bonificaciones por nuevas altas de familiares colaboradores de trabajadores autónomos. La bonificación equivaldrá al 50% de la cuota que resulte de aplicar sobre la base mínima de cotización durante los 18 meses inmediatamente siguientes a la fecha de alta. Además, se ha pactado que los “descuelgues” de un convenio de ámbito superior se produzcan si la empresa suma dos trimestres consecutivos de disminución persistente de ingresos ordinarios o ventas respecto al mismo período del año anterior. >efe/e.p.