MADRID. Tras 30 minutos de negociación, las acciones del banco nacionalizado la pasada semana registraban una revalorización del 9 % hasta 1,55 euros, pese a que todavía sigue muy por debajo del precio al que salió a Bolsa, en julio de 2011.
En concreto, acumula un descenso del 60 % desde entonces, lo que suponen fuertes pérdidas para los más de 347.000 nuevos accionistas particulares que acudieron a la operación, y que invirtieron una media de 7.000 euros.
Los expertos consultados por Efe atribuyen la recuperación de hoy a un efecto técnico, tras las fuertes caídas de los últimos días, pero también a las llamadas a la calma que realizaron diferentes miembros del Gobierno y también la propia entidad.
El miedo a una retirada masiva de fondos hizo que, en algunos momentos de la sesión de ayer, los títulos retrocedieran un 28 %, aunque al cierre moderó su desplome y cerró con un retroceso del 14,08 %, hasta 1,42 euros por acción.
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, reconoció ayer que la situación actual es "sumamente convulsa" pero aseguró, en declaraciones a Efe-TV, que la actividad del grupo está siendo estos días "básicamente normal".
"La evolución de los depósitos en la primera quincena del mes de mayo" tiene un carácter sustancialmente estacional, ha explicado Bankia en un comunicado después de conocerse que en los últimos días se han esfumado más de 1.000 millones.
En la misma línea, el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, negó que haya una salida generalizada de depósitos en Bankia, que, en su opinión, cuenta con un nuevo proyecto que reúne todos los requisitos para ser un éxito de futuro.
Además, ha recordado que Bankia contará con el apoyo del Estado, que aportará el capital necesario para garantizar su viabilidad.
