MADRID. Descontando los beneficios fiscales, este esfuerzo se dispara hasta el 36,2%, cuatro décimas menos que en el trimestre anterior, pero por encima del 33% recomendado por el Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación.
Pese al alivio que han traído los primeros meses del año, el esfuerzo financiero que realizan las familias para comprar una vivienda sigue siendo superior al de hace un año, ya que el esfuerzo teórico con deducciones se situó en el 27,2% en el primer trimestre de 2011, dos puntos porcentuales menos, y en el 33,5%, casi tres puntos menos, sin contar con estos beneficios.
Por otro lado, las familias tenían que dedicar 6,1 veces su renta bruta disponible a la compra íntegra de su vivienda en el primer trimestre, dos décimas menos que al cierre de 2011 y cuatro décimas por debajo de los niveles de hace un año.