donostiA. En plena batalla política entre las tres diputaciones y el Gobierno vasco a cuenta de la posible desarmonización fiscal en la que podría verse sumada Euskadi en los próximos meses, el secretario general de Adegi, Eduardo Zubiaurre, elevó ayer un poco más la tensión al asegurar en una entrevista con este periódico que la desarmonización fiscal "va a ser algo muy grave y perjudicial para el territorio de Gipuzkoa", un mensaje en clara alusión a la política de exclusión que su mayor fuerza en el Territorio, Bildu, parece estar decidida a llevar adelante si no se tiene en cuenta su hoja de ruta fiscal. El representante de la patronal guipuzcoana insiste en la necesidad de definir una política fiscal y otra serie de medidas que ayuden a incrementar la actividad económica y el empleo.

más flexibilidad En este sentido, Zubiaurre afirma que la fiscalidad es un "elemento de competitivad" para generar actividad económica y empleo, y califica la "urgente" reforma laboral como unos de los "grandes déficits que tiene el sistema laboral español". Según el portavoz, la reforma es una preocupación de las empresas porque las personas son un recurso importantísimo de las mismas, "y es algo que los estamos gestionando muy mal, con mucha rigidez y muy altos costes", sostiene Zubiaurre. A su juicio, la falta de una contratación "natural" por parte de los empresarios se justifica por la "desconfianza y el miedo a lo desconocido" que en estos momentos reina en el ambiente, donde la flexibilidad continúa siendo un elemento tan deseado como denostado en las empresas. "Los entornos más dinámicos son aquellos donde hay más flexibilidad, lo que no significa que las personas se quedan sin protección", concluyen en Adegi.