GASTEIZ. El Gobierno vasco revisará a la baja su previsión de crecimiento económico para 2011, inicialmente fijada en el 1,4 por ciento, aunque de momento no tiene pensado acometer nuevos recortes, según ha anunciado este martes el consejero de Economía, Carlos Aguirre.
Tras la celebración del Consejo de Gobierno, Aguirre ha adelantado la intención del Ejecutivo de revisar a la baja la previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de Euskadi para este año, como consecuencia de la "difícil coyuntura internacional", que afecta a la economía vasca.
Aunque no ha cuantificado la rebaja en la previsión --su departamento aún está realizando los cálculos pertinentes-- y ha emplazado a final de mes para fijar una cifra concreta, sí ha admitido que no puede aventurar si el crecimiento del PIB vasco superará el uno por ciento.
No obstante ha asegurado que, en principio, el Gabinete de Patxi López no tiene previstos nuevos recortes, ya que considera que "con las medidas adoptadas antes del verano" Euskadi tendrá capacidad "para cumplir los objetivos" de reducción de déficit.
El responsable de Economía y Hacienda del Ejecutivo autonómico también ha considerado que "en principio" no será necesario modificar las directrices aprobadas antes del verano para la elaboración de los Presupuestos de 2012 ni reducir el techo de gasto previsto.
Aguirre, que ha analizado los datos dados a conocer este martes sobre la evolución de la economía vasca en el trimestres del año --el PIB creció un 0,2 por ciento respecto al trimestre anterior--, ha reconocido que la coyuntura económica internacional es "compleja".
Tras referirse al riesgo de quiebra de Grecia y a la incertidumbre sobre la solvencia de países como Italia o España, así como a la desaceleración de las principales economías del mundo, ha subrayado la influencia que estos factores tienen en la economía de la comunidad autónoma.
El consejero de Economía ha subrayado que la situación internacional es "difícil" y ha recordado que diversos organismos transnacionales ya han revisado a la baja sus previsiones económicas para este año.
Además, ha señalado que el incremento del 4,5 por ciento en la recaudación de la hacienda vizcaína entre enero y agosto "no establece ningún criterio diferente" que pueda evitar una disminución de la cifra de crecimiento prevista. Por el contrario, ha manifestado que no existe "ningún indicador que diga que puede haber una reactivación de la economía mundial".
