Madrid. Los rumores de una intervención del BCE en el mercado de deuda hicieron que la prima de riesgo española se desplomara y cerrara la sesión en 370,87 puntos básicos, por debajo de la de Italia por primera vez desde mayo de 2010, cuando despuntó el contagio de la crisis de la deuda griega.
La prima de riesgo, que alcanzó por la mañana el récord de 417,6 puntos básicos, emprendió poco después una escalada bajista que le hizo cerrar en su nivel más bajo de la semana.
Esa caída fue posible gracias a que la rentabilidad del bono español a 10 años descendió hasta el 6,053%, frente al 6,284% del miércoles, mientras que la de su homólogo alemán avanzó hasta el 2,345%, en comparación con el 2,300% del jueves.
El rendimiento de la deuda pública española se colocó así por debajo del que exigen los inversores a los títulos italianos a 10 años, que terminaron la sesión en el 6,081%, lo que propició que su prima de riesgo se situara en 373,6 puntos básicos.
De este modo, Italia desplaza a España como el país de la Unión Europea que no ha sido rescatado y que tiene mayor percepción de riesgo para los inversores.
Los bonos italianos con vencimiento en 2021 resultaron menos beneficiados que los españoles en su bajada, que fue de una décima respecto al 6,189% del jueves.
En cualquier caso, la rentabilidad de la deuda soberana de todos los países periféricos de la Unión Europea, a excepción de Grecia, sufrió importantes descensos, debido a los rumores de que el Banco Central Europeo (BCE) estaba comprando títulos.
Por ejemplo, el rendimiento de los títulos a 10 años de Irlanda descendió hasta el 9,81%, por debajo de la barrera del 10% por primera vez desde abril, en tanto que la rentabilidad de los bonos portugueses cayó casi tres décimas, hasta el 10,669%.
Según operadores del mercado consultados, el organismo encabezado por Jean-Claude Trichet habría adquirido bonos de España e Italia, después de que el jueves actuara supuestamente sólo sobre los de Portugal e Irlanda.
La ambigüedad con la que habló Trichet -criticada por ejemplo por la vicepresidenta para Asuntos Económicos, Elena Salgado- agudizó la tensión en el mercado de deuda, lo que llevó a la prima de riesgo española a cerrar el jueves en 398,4 puntos básicos, su nivel más alto desde la creación del euro.