donostia. El consejo de administración de Kutxa ha delegado en su presidente, Xabier Iturbe, la decisión sobre la fecha de celebración de la asamblea general extraordinaria de la caja guipuzcoana que deberá aprobar su integración con BBK y Caja Vital en la SIP Kutxa Bank, cuyos consejos de administración sí que aprobaron ayer en una reunión celebrar sus respectivas asambleas con este fin el próximo 16 de septiembre.

Esta decisión, adoptada en la reunión que el consejo de administración de Kutxa celebró ayer en Donostia con carácter extraordinario, se basa en la necesidad de garantizar el voto favorable de la mayoría cualificada de los dos tercios de los asistentes a la asamblea general para poder convocar la reunión del máximo órgano de gobierno de la caja y evitar, de esta forma, lo ocurrido en noviembre de 2008, cuando se frustró la fusión entre la entidad guipuzcoana y BBK por no contar con la mayoría suficiente.

A día de hoy, la falta de acuerdo entre los representantes de las cajas y los sindicatos en la mesa laboral de la integración, que se encuentra bloqueada, hace que no se sepa cuál va a ser la posición que va a adoptar CCOO en Kutxa, donde sus 10 votos son necesarios para sacar adelante la fusión fría, a pesar de que carecen de valor la representación que tiene en las asambleas de BBK y Caja Vital, donde su concurso es innecesario por la mayoría aplastante que tienen PNV, PSOE y PP.

Los diferentes planteamientos que existen en el seno de CCOO entre sus representantes de Kutxa y los de BBK y Caja Vital en algunos conceptos como, entre otros, prejubilaciones y movilidad, hacen que los responsables de Kutxa no sepan cuál es la posición del sindicato liderado por Unai Sordo y han optado por dejar abierta la convocatoria de la asamblea general hasta que se aclare el panorama, según fuentes de Kutxa.

protocolo de lab Por otro lado, la presentación de un protocolo de integración de las cajas vascas por parte de LAB para romper el bloqueo de la negociación laboral, abre un nuevo escenario en el proceso de negociaciones que el presidente de Kutxa está manteniendo con los colectivos representados en la asamblea general. El documento, que defiende el modelo social de la entidad resultante de la integración y pide garantías de que el 30% de sus beneficios vaya a la Obra Social, puede servir de aproximación entre las partes por la coincidencia que hay en algunos aspectos.