vitoria. Las acerías vascas recuperan poco a poco sus niveles de producción y así el pasado año salieron unos 6,2 millones de toneladas de acero de sus plantas, lo que supone del orden del 38% del total del Estado. La recuperación fue notable pero la baja demanda de la construcción afectó a algunas plantas, lo que hizo que el incremento de la producción del orden del 7% fuese inferior al crecimiento medio español del 14%, según Unesid. Estas cifras están todavía lejos de las obtenidas antes de la crisis, que en 2007 alcanzó los 8,5 millones de toneladas y un récord de 19 millones en España.

Aunque la fiesta va por barrios, el sector vasco se benefició de la buena evolución del segmento de acero especiales e inoxidables, de la recuperación de la producción de tubos de acero sin soldadura en Tubos Reunidos y Tubacex, tras un mal 2009, y de la positiva evolución de la Acería Compacta (Arcelor Sestao) en bobinas, con destino al automóvil principalmente. Ello compensa la mala situación de las plantas dedicadas a la producción de acero común para el sector de la construcción. La elaboración de productos largos acusa la crisis de su principal cliente y salvó la producción de perfiles en la antigua Aristrain de Olaberria el año no fue bueno para este segmento. Con todo, la recuperación de la producción en las plantas vascas fue inferior a la media española ya que las grandes instalaciones de hornos altos en Asturias, la antigua Ensidesa se movió a un muy buen nivel.

La producción total de acero bruto en el Estado creció en 2010 un 14% anual, llegando hasta los 16,3 millones de toneladas, según Unesid. A pesar de la recuperación, la cifra equivale a la obtenida durante el año 2003.

La evolución durante el año pasado no fue homogénea. En la primera mitad fue creciente, mientras que en la segunda, al igual que aconteció con la economía española tras conocerse los planes de ajuste con recortes salariales de los funcionarios y demás medidas restrictivas del gasto, presentaron resultados más débiles. Atendiendo a las distintas calidades, la mejora más significativa se produjo en los aceros especiales de aleación, los de mayor valor añadido, que crecieron un 111%, hasta 660.000 toneladas. Los aceros inoxidables en el Estado aumentaron su producción un 22%, hasta 844.000 toneladas y la subida menor, un 11%, se produjo en los aceros no aleados, con 14,8 millones de toneladas.