vitoria. Los ciudadanos que cada mes tienen que hacer frente al pago de una hipoteca ya saben que el tipo de interés que se les aplica cambió de tendencia en los últimos meses de 2010 registrando ligeras subidas, con lo que su préstamo se encarecerá cuando toque revisarlo. Pero también tienen que hacerse a la idea de que el euríbor mantendrá una senda alcista durante este año, en el que se prevé que se sitúe entre el 1,75% y el 2%, medio punto por encima del nivel de 2010 (1,526%).
El euríbor, que es el indicador hipotecario más común, cerró 2010 con un repunte de 0,28 puntos y en 2011 su subida también será moderada, situándose entre 0,22 y 0,47 puntos, según los analistas consultados por Europa Press. Este repunte se traducirá en un incremento anual de las cuotas en unos 130 euros al año, si el indicador fija su nivel máximo en el 1,75%, aunque se incrementará hasta los 350 euros si finalmente se sitúa en el 2%.
En concreto, los usuarios que tengan una hipoteca media de unos 120.000 euros, a 25 años y con un diferencial del 0,80% pagarán a finales de 2011 unos 538 euros si el indicador se sitúa en el 1,7%, y unos 556 euros si finalmente llega hasta el 2%, frente a los 527 euros que pagaban de media en 2010. Se prevé que la subida del euríbor en 2011 sea moderada porque la situación económica general no aconseja un repunte de los tipos de interés.
No obstante, este encarecimiento puede ser inferior en función del nivel que finalmente alcance el euríbor y variará según el mes en el que los usuarios tengan que revisar sus hipotecas. A pesar de que el repunte de las hipotecas en 2011 estará lejos de los niveles que alcanzaron en 2008, se suman a los de las tarifas de la luz, el gas o el transporte y mermará el poder adquisitivo de los hogares.
la deuda A finales de noviembre de 2010 la deuda hipotecaria de las familias del Estado español alcanzó los 675.838 millones, lo que supone un leve incremento del 0,1% respecto al mismo mes de 2009, cuando también crecía a un ritmo del 0,1%, según datos del Banco de España. A pesar de que el crecimiento de los préstamos para vivienda apenas registró variación en la segunda mitad de 2010 debido a las restricciones de las entidades financieras y a las dificultades económicas de las familias, continúan representando el 75% de la deuda de los hogares, que se situaba en noviembre en 902.057 millones.
Según la previsión de los expertos, las familias que soliciten un préstamo hipotecario durante 2011 tendrán que asumir, con toda probabilidad, criterios más estrictos que los aplicados durante 2010, ya que los tipos de interés continúan bajos y las entidades deben compensar las caídas de ingresos en sus márgenes y controlar los riesgos de impago.
El analista de IG Markets Daniel Pingarrón cree que "es muy posible que la banca suba los márgenes sobre el euríbor" y que vincule más a sus clientes para compensar esta situación en sus balances. Asimismo, los expertos creen probable que algunas entidades se muestren más estrictas con la petición de avales o con la capacidad de ahorro de los clientes, y que reduzcan el importe máximo que debe suponer la cuota hipotecaria en relación a la nómina hasta el 30%.
