Dublín. El Gobierno irlandés continuó ayer negociando en Dublín con la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) el plan de austeridad cuatrienal, que se presentará el próximo martes, con renovadas esperanzas de mantener en el 12,5% su impuesto sobre sociedades.

El primer ministro irlandés, Brian Cowen, indicó ayer que la redacción del citado plan se encuentra "muy avanzada" y si éste cuenta con el visto bueno de la UE y el FMI, los expertos de estos organismos podrían concluir su "investigación" en Dublín en pocos días.

Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, dejó entrever que Irlanda podría mantener su tasa corporativa, a pesar de que algunos socios comunitarios aboguen por una subida para que el impuesto irlandés sea más acorde con la media europea. En declaraciones a la Radiotelevisión irlandesa (RTE), recordó que todos los países tienen acceso, si lo piden, al "paraguas de protección" que ofrece la zona euro.

"Todo lo demás son cuestiones para cada país", precisó la canciller al ser preguntada si compartía con parte de su ciudadanía el malestar por las ventajas que ofrece un impuesto de sociedades bajo.

La cadena pública irlandesa se hizo eco de unas declaraciones del presidente francés, Nicolás Sarkozy, quien expresó su deseo de que Irlanda eleve su tasa corporativa, aunque precisó que no es uno de los requisitos del rescate comunitario. "En las condiciones para activar el mecanismo (de ayuda), no figuran demandas fiscales", subrayó el presidente galo en Lisboa, donde asiste a la cumbre de la OTAN.

El montante del paquete financiero que tendrá que solicitar Dublín vendrá determinado por la opinión de los expertos sobre su viabilidad y su análisis sobre las perspectivas de crecimiento de la economía.

El primer ministro también indicó que los recortes previstos en el texto y en los presupuestos generales del Estado para 2011, que se presentarán ante el Parlamento nacional el próximo 7 de diciembre, no serán más "severos" por las condiciones del rescate financiero.

Irlanda considera que su economía volverá a crecer en los próximos cuatro años, lo que encaja con el objetivo de ahorro de 15.000 millones de euros para 2014 y la reducción hasta el 3% de su déficit público, después de cerrar este año en el 32% con respecto al PIB.

El Gobierno trabaja con la UE y el FMI en la elaboración de un plan de reestructuración de su sistema bancario, ya que los 30.000 millones ya inyectados por el Estado en las entidades desde el comienzo de la crisis en 2008 no ha generado confianza en los mercados internacionales.

estimaciones del rescate Sus estimaciones sobre la factura final del rescate bancario, fijado en 50.000 millones de euros, se han quedado obsoletas, por lo que es difícil poner una cifra final al paquete de ayudas de la UE, aunque se manejan números que rondan los 100.000 millones.

El primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, declaró a la RTE que su país, fuera de la moneda única, considerará la posibilidad de conceder un "préstamo bilateral" si Irlanda lo pide, como hizo con Islandia y Letonia. Sobre la tasa corporativa, Reinfeldt recordó que cualquier decisión deberá ser tomada "por el pueblo y el Gobierno irlandés".

El viernes, una delegación de la oficina de la Cámara de Comercio Americana en Dublín se reunió con funcionarios del Ministerio de Finanzas para mostrar su preocupación por los llamamientos de socios comunitarios, como Francia, para que Irlanda suba este impuesto. El Gobierno aseguró que, aunque el plan de austeridad contempla profundas reformas del sistema fiscal irlandés, la cuestión de la tasa corporativa es "innegociable".