BILBAO. El trabajo doméstico no remunerado desarrollado en la Comunidad Autónoma Vasca supondría 19.642 millones de euros, lo que equivaldría al 28,7 por ciento del Producto Interior Bruto de 2008,
El Instituto Vasco de Estadística (Eustat) ha elaborado la cuarta edición de la Cuenta Satélite de la Producción Doméstica, cuyo objetivo fundamental es proporcionar una imagen global de las actividades productivas realizadas por los hogares y estimar el valor económico aportado por dichas actividades.
Las principales actividades estimadas son las de proporcionar alojamiento y comida, el cuidado y la educación y las tareas relacionadas con la ropa.
El Eustat ha destacado que desde 1993 hasta 2008, el porcentaje que representaría el trabajo domestico no remunerado respecto del PIB ha caído del 47,5 por ciento al 28,7 por ciento.
Esta transferencia de recursos desde la economía doméstica no remunerada hacia la economía de mercado se explica por los años de bonanza económica y por la incorporación de la mujer al mercado laboral, lo que ha dado lugar a que la producción que en años previos se generaba en la economía doméstica, ahora se demande en el mercado.
La distribución por funciones no presentó grandes diferencias respecto al año 2003.
En 2008 las funciones que concentraron una mayor proporción del total fueron las de Proporcionar comida (44,7%) y Alojamiento (30,4%), seguidas, con menor importancia, por las funciones de Proporcionar cuidados y educación (15,5%) y finalmente, Ropa y otros (9,4%).
Del año 2003 al 2008 la participación masculina ha crecido más de tres puntos porcentuales, al pasar del 24,8 por ciento al 28,1 por ciento en 2008.
Por funciones, fue en Proporcionar Cuidados y Educación (31,5%) donde fue mayor la aportación de los varones en 2008, seguida por la función de Proporcionar Alojamiento (31,1%), mientras que la menos participada fue la de proporcionar Ropa y otros (13,7%).
La distribución por territorios de la Producción Doméstica siguió la pauta relativa al peso de la población de cada uno de ellos, generando Araba el 12,4 por ciento del trabajo doméstico, Bizkaia el 56,8 por ciento y Gipuzkoa el 30,8 por ciento restante.
La distribución del trabajo doméstico entre géneros fue similar en los tres territorios, pero en Vizcaya hubo una participación de los varones superior en más de un punto porcentual a la media de la Comunidad Autónoma.