El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, aseguró ayer que se siente "abrumado y contento" después de que los empresarios le ratificaran ayer en su cargo, y aprovechó para exigir "lealtad" al presidente de Cepyme, Jesús Bárcenas, después de que éste no acudiera a la reunión del Comité Ejecutivo de la organización empresarial española. Un día después de que Díaz Ferrán pusiera su cargo a disposición de la CEOE y fuera ratificado tanto por el Comité Ejecutivo como por la Junta Directiva de la patronal, aseguró que es preciso pedirle a Bárcenas "y casi diría exigirle", añadió que tenga "la lealtad que tienen que tener todas las organizaciones que están dentro de la CEOE".