“Tenemos un problema con el deporte escolar en Álava”. Las palabras son pronunciadas por Ana del Val, diputada foral de Cultura y Deporte cuando se le cuestiona por un grave problema de la sociedad en general que en los últimos tiempos se ha trasladado al ámbito que ella dirige en el territorio. 

Se trata de la violencia que se respira en todos los recintos deportivos de Álava, donde todos los fines de semana se viven situaciones muy desagradables con insultos, agresiones y todo tipo de comportamientos incívicos con el árbitro en la diana en la mayoría de las ocasiones. Sin obviar tampoco las tiranteces entre los propios padres.

Pues bien, la Diputación Foral de Álava quiere atajar de raíz este problema y, para ello, ultima para enero de 2024 la presentación de una campaña de sensibilización “muy potente”. En ella tomarán parte todos los agentes que rodean al deporte escolar en Álava, practicado por alrededor de 22.000 niños, y para que cale hondo contará con la participación de los principales clubes y deportistas del territorio.

“Cada vez más tenemos problemas en las gradas con los padres y madres de los equipos. No vamos a tolerar ningún tipo de violencia hacia los niños, sobre todo en el deporte escolar, que es nuestra responsabilidad absoluta. Negar que hay un problema sería absurdo, ya que llevamos tres años tomando medidas importantes para evitar enfrentamientos, pero siguen ocurriendo”, lamenta Del Val.

La diputada foral de Cultura y Deporte considera que “es un problema de la sociedad” y pide hacer “un click” para que “los niños jueguen y compitan”, evitar insultos y que el comportamiento en las gradas “sea el adecuado”.

La Diputación Foral de Álava ya subvenciona para la categoría cadete, junto a la Fundación Vital y la Escuela Vasca del Deporte, el programa Deportivity, aunque sus iniciativas no están dando los frutos deseados para que la deportividad y el buen comportamiento continúe imperando en las canchas de los colegios y muchos clubes alaveses de fútbol y baloncesto

También se han registrado incidentes aislados en otras modalidades como el balonmano, si bien la institución foral quiere poner los cinco sentidos en atajar los conatos de violencia existentes en los dos deportes mayoritarios.

“Ya hemos puesto en marcha muchos programas piloto que están funcionando muy bien, pero esto es una labor de toda la sociedad en general. Estaríamos haciendo algo mal si obviamos el problema. En las gradas se insulta cuando están jugando niños. Es algo muy grave que no vamos a permitir porque la Diputación es quien tiene la competencia del deporte escolar”, enfatiza Ana del Val.