Nadie como Tadej Pogacar, un ciclista infinito. Por eso llegó solo para reinar en el latifundio del Tour de Flandes, un lugar para la memoria colectiva, para el imaginario de varias generaciones. “Yo vi correr a Pogacar”, se citará para atestiguar la visión de algo extraordinario, sobrenatural. Camina hacia la leyenda el esloveno, que es todo los ciclistas en uno. En domingo de ramos, obró el milagro. Uno más. El costumbrismo de lo excepcional. 

Pogacar es un ciclista de época, histórico, antes incluso de acabar su biografía ciclista, de oro. “Nunca olvidaré este día. Me podría retirar del ciclismo y estaría contento con lo que he conseguido”, expuso Pogacar tras coronarse en el Tour de Flandes. En realidad, imperial, la victoria del esloveno tuvo algo del gesto de Napoleón, que se autocoronó. No se le antoja límite a Pogacar.

A la estela de Merckx

Nada se le resiste al esloveno, un loco maravilloso que honra la épica del ciclismo. Más allá de su exuberante palmarés, el esloveno transciende por su forma de competir, por el camino que elige a la victoria: el ataque total. Es su estilo de vida. Valiente, poseedor de un motor formidable y una ambición sin límites, nunca mide. Corre para conseguir la victoria, ajeno a los recorridos, los rivales, los paisajes o las estaciones del año. Qué más da. Pogacar contra el mundo hasta agarrarlo con las manos. 

El esloveno es el heredero de Eddy Merckx, El Caníbal. Mismo apetito, idéntica voracidad. El chico de los prodigios, apenas 24 años, dos Tour de Francia en la vitrina, talló un actuación monumental con los adoquines que atravesó en el Tour de Flandes.

Pogacar conquistó la gran clásica a su manera, que en realidad son todas. Minero, estajanovista, derrochón, Pogacar lo zarandeó todo con el entusiasmo de los muchachos que se divierten. Es un terremoto. Una tormenta desatada.

Pogacar, contra la historia

Corre contra la historia el pizpireto esloveno, un ser despiadado cuando compite. Nada crece a su alrededor. Atila. Todo está a su alcance. No le asustan las piedras. Con ellas apedreó al resto, a los que aplastó hasta hacerlos polvo. Lo mordió Van der Poel, al que desfondó, y apagó a Van Aert, la rodilla izquierda ensangrentada, que cedió en el esprint del grupo ante Pedersen. Pogacar está hecho del material del que están hechos lo sueños

En Flandes condecoró su pechera de general con otra medalla dorada. Después de vencer la Lieja y en dos ocasiones Il Lombardia, se colgó el brilló del Tour de Flandes. Solo Louison Bobet y Merckx fueron antes capaces de unir la gloria de Flandes con la del Tour, que son competiciones antagónicas porque exigen dos tipos de fisionomías.

Ese es el valor de Pogacar, que todo lo compite sin desmayo. En lo que va de curso amasa diez triunfos, para un total de, 56. El esloveno que todo lo puede, se entronizó en el Tour de Flandes fiel a su manual de estilo. Camina o revienta. No sabe correr de otra manera Pogacar, brutal bajo cualquier análisis. 

Dinamita en el Kwaremont

Después de una tunda, de la fuga, de la caída con montonera, del abandono de Oier Lazkano, del encuentro entre los tres magníficos: Pogacar, Van der Poel y Van Aert, en la última aparición del viejo Kwaremont, el lugar en el que las piedras susurran leyendas entre el griterío de los aficionados, Pogacar sacudió a todos.

Despachó a Van der Poel, que viajaba junto a él en el grupo cabecero, y liquidó a Van Aert, para entonces deshilachado. Dolorida la pierna izquierda, el belga no pudo soportar el estacazo del enérgico y electrizante esloveno.

Por delante jadeaba Mads Pedersen hasta que Pogacar, con ese mechón que le sobresale del casco plateado a modo de aleta de tiburón, le mordió la esperanza. Lo masticó y lo escupió al olvido. Van der Poel, la bestia, trató de cauterizar la brecha que abrió el esloveno, pero tuvo que claudicar, guillotinado ante el tremendismo del esloveno, en moto. Plegó el Paterberg y se presentó en el acto de su autocoronación. Pogacar es el rey de Flandes. 

Tour de Flandes

Clasificación

1. Tadej Pogacar (UAE) 6h12:07

2. M. Van der Poel (Alpecin) a 16’’

3. Mads Pedersen (Trek) a 1:12

4. Wout Van Aert (Jumbo) m.t.

5. Neilson Powless (Education First) m.t.