El Campeonato de Parejas regresa este viernes al frontón Manuel Malo de Buñuel, un escenario en el que no se habían programado partidos de pelota a mano profesional hasta la edición de 2020 -que vencieron Ezkurdia y Martija después del parón de la pandemia del covid-19-.
En aquella ocasión, en enero, cuando la crisis sanitaria aún no había agitado el panorama mundial, la localidad de La Ribera, a un paso de la provincia de Zaragoza, llenó las gradas de la cancha para el enfrentamiento entre Irribarria-Rezusta y Ezkurdia-Martija, que se resolvió con un claro 22-9 para los zurdos guipuzcoanos.
SUELO DE HORMIGÓN
La actividad profesional retorna a Buñuel con el duelo entre Urrutikoetxea-Aranguren (cuatro puntos) y Laso-Imaz (cinco), dos combinaciones separadas por un solo triunfo. “No conocía el frontón, es diferente. No estamos acostumbrados. Es la primera vez que vengo a jugar aquí”, destaca el delantero de Zaratamo.
Valora además que “tiene un suelo de hormigón, distinto del que solemos usar. Espero que se nos dé bien”.
FRONTÓN RÁPIDO Y CARGAR ATRÁS
Unai Laso, por su parte, admite que “está bien”. “Tiene buena pinta. Es un frontón rápido y para mi juego me viene bien”, concreta el delantero de Bizkarreta-Gerendiain, quien adelanta que “nuestro juego será cargar atrás. Esperamos completar una buena actuación, porque el punto es muy importante”.
Respecto al material propuesto este miércoles por el seleccionador, Martín Alustiza, el puntillero navarro asevera que “nuestras pelotas son algo más rápidas que las suyas”.
“Las seis son bastante parecidas”, aclara Aranguren.
