El Real Madrid no pudo pasar del empate sin goles ante Osasuna, aunque recuperó el liderato de manera provisional. La defensa de cinco por la que apostó Jagoba Arrasate se le atragantó al cuadro blanco, que rebajó su efectividad ofensiva. Hasta 17 remates, con apenas tres tiros a puerta, dejaron los jugadores de Ancelotti en un encuentro en el que Vinicius protagonizó la ocasión más clara del primer acto y Benzema y Casemiro, con un lanzamiento desde el centro del campo, hicieron lo propio tras el descanso.