- Caeleb Dressel no podrá alcanzar las seis medallas de oro que se había propuesto conquistar en Tokio tras ser incapaz de evitar la derrota del equipo estadounidense en una final mixta de los 4x100 estilos en la que ni siquiera subieron al podio. Tropiezo del que no se puede responsabilizar a Dressel, que luchó por llevar a su equipo a las medallas pese a afrontar la posta final desde la última posición y con una desventaja de ocho segundos, teniendo que conformarse con la quinta plaza.
Un resultado que trastocó una jornada que estaba resultando extraordinaria para Dressel, quien en la primera prueba del día sumó su tercera medalla de oro en la capital japonesa tras imponerse en la final de los 100 mariposa con nuevo récord del mundo (49.45) incluido. Se trata posiblemente de la prueba en la que el de Florida mejor hace valer su poderío físico y excelente técnica, un dominio que sólo parece atreverse a cuestionar el húngaro Kristof Milak. Dressel ha convertido la amenaza que supone el nadador magiar en el motor necesario para crecer, como quedó claro en esta final, un esfuerzo con plusmarca de todos los tiempos incluida que no impidió que cuarenta minutos más tarde firmase, con un crono de 21.43, el mejor registro de las semifinales de los 50 metros libre tras aventajar en 11 centésimas al francés Florent Manaudou.
Dressel será el rey de la natación en estos Juegos, un título que en la categoría femenina compartirán la estadounidense Katie Ledecky y la australiana Ariarne Titmus, tras el triunfo de la primera en la final de los 800, victoria que le permitió tomarse la revancha de las derrotas encajadas ante su rival en las finales de los 200 y 400 libre. La estadounidense cierra su concurso en el Centro Acuático de Tokio con cuatro medallas, tras colgarse dos oros (800 y 1.500) y dos platas (400 y 4x200), una menos de las que conquistó en Río de Janeiro, donde sumó cuatro oros y una plata.