- El covid volvió a propinar ayer un golpe muy duro a Jon Rahm al apartarle de los Juegos de Tokio, uno de sus grandes objetivos del año y en el que había puesto toda su ilusión y ambición. Según comunicó el Comité Olímpico Español, el golfista de Barrika dio positivo en la última de las tres PCR que debía superar para poder viajar, según obligan las normas sanitarias a quienes dos semanas antes hubieran estado en Gran Bretaña. Repitió la prueba dos veces más, pero todas dieron positivo y el mazazo cayó de nuevo sobre él. No fue el único al que le ocurrió ya que también se queda fuera por idéntico motivo Bryson DeChambeau, otro de los candidatos a medalla en el golf olímpico, que será sustituido por Patrick Reed.

La Federación Española de golf anunció en principio que no iba a poder cubrir la baja del número 1 del mundo por falta de tiempo, pero ante la posibilidad de que la plaza corriera a otro país aceleró las gestiones para que el extremeño Jorge Campillo pueda estar en el tee de salida del torneo que empieza este jueves para acompañar al catalán Adri Arnaus.

Rahm dio positivo tras la tercera jornada de The Memorial, en el que fue descalificado, hace casi dos meses al final de una semana en la que había recibido la primera dosis de la vacuna de Janssen. Pasó la correspondiente cuarentena a tiempo de disputar el US Open que ganó. Después, viajó sin ningún contratiempo y tras pasar todas las pruebas correspondientes a Gran Bretaña, donde en semanas consecutivas disputó el Scottish Open y The Open Championship. De ahí regresó a Arizona y ha sido cuando debía desplazarse a Tokio cuando ha vuelto a dar positivo para sorpresa general, sobre todo en la delegación olímpica española que aguardaba su llegada a Tokio, y también incomprensión por dos episodios de positivo en tan corto espacio de tiempo.

“Me habría gustado lograr una medalla, pero el destino tiene otros planes para mí”, lamentó de nuevo el barrikoztarra, que en sus redes sociales dejó otro mensaje moderado, pero muy claro: “Este es un gran recordatorio para todos nosotros de que todavía estamos en una pandemia. Las cosas no han terminado y todavía tenemos que luchar juntos para superar esto lo mejor que podamos”. “Deseo mucha suerte a todos los grandes atletas que están representando a España. Les estaré observando y animando desde casa”, concluyó.

Este contratiempo puede hacer también que Jon Rahm modifique su calendario inmediato. Su plan era saltarse el WGC de Memphis que se juega del 5 al 8 de agosto, pero quizás reconsidere su decisión y afronte el último torneo de gran nivel antes del inicio de los play-offs de la FedEx Cup el 19 de agosto. Al menos, el de Barrika conservará el número 1 del mundo al margen de lo que ocurra en Tokio ya que su ausencia y la de DeChambeau reducen el volumen de puntos a repartir y Collin Morikawa no le podrá alcanzar aunque gane la medalla de oro.