- "Tengo mis dudas de si el presidente de la FIFA está en el mismo barco que la FIFA". Estas sospechas las vertió ayer el presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas, sobre el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, a quien acusó de actuar a espaldas de los organismos a los que representa el máximo dirigente del fútbol mundial.

En la conferencia virtual Soccerex, Tebas expresó que le "consta" que Infantino ha "participado en reuniones sobre la Superliga" europea y le instó a "aclarar" si ha dado "apoyo explícito" para su creación. "Tengo mis dudas sobre el presidente de la FIFA. Debe aclarar si ha participado en reuniones de este proyecto, que a mí me consta que sí, y si en alguna de esas reuniones ha dado apoyo explícito. Debe aclarar si el nombre en clave W01 que aparece se refiere a Gianni Infantino, como todo el mundo creemos. Debe aclarar esa situación", declaró el presidente de la patronal de clubes españoles, para apostillar: "La FIFA no es Infantino". Con ello Tebas quiso referirse al comunicado emitido dos semanas atrás por la FIFA y las confederaciones continentales en el que se rechazaba el proyecto de Superliga europea, detallando que los clubes que participaran no contarían con el reconocimiento de las organizaciones internacionales.

Con su discurso, Tebas tachó de irresponsable a Infantino, al considerar que este ha formado parte de un proyecto que resultaría letal para el orden y la composición del fútbol europeo. "Si la Superliga fuera parte del futuro, habría que ir cerrando las ligas, la UEFA tendría que cerrar su institución, porque parece que se lo queda todo la Superliga. La Superliga europea, y lo han dicho las confederaciones, no es un proyecto que deba estar, porque además es la ruina para las ligas nacionales y para esos mismos clubes. Se carga un ecosistema que va muy bien y se lo quedan para ellos", analizó. Cabe recordar que el diario británico The Times publicó un documento, al parecer filtrado, que sostenía que la Superliga estaría compuesta por 15 clubes, tres de ellos españoles -Barcelona, Atlético de Madrid y Real Madrid-, y reportaría a cada participante unos 350 millones de euros por sumarse. Tebas entiende que sería una actuación que, más allá de ir al margen de los organismos oficiales, generaría una desigualdad decisiva.

Tebas exigió además responsabilidad a la FIFA, ya que considera que deben "pensar mucho el daño que hacen con sus decisiones". "Se hablaba de un Mundial de clubes de 1.000 millones, sabíamos que eso no era posible, o inventarse Superligas... Cuidado con el ecosistema que tenemos, porque podemos hacer tambalear a todo el fútbol, grande, pequeño y mediano", subrayó.

Por otro lado, Tebas sacó a relucir su optimismo sobre la posibilidad de que el público regrese a los estadios en los próximos dos o tres meses. A su juicio, el retorno de los aficionados a las gradas sería "posible en abril o mayo" si "en febrero crece la vacunación y disminuye el nivel de contagios", lo que, considera, dependerá de la evolución de la pandemia en las "próximas dos o tres semanas", y más específicamente del proceso de vacunación. El presidente considera que "el final del túnel" dependerá de la administración de la vacuna. "Esperemos que sea más rápida", deseó el dirigente. Tebas también admitió que el incremento de la incidencia acumulada del covid-19 ha provocado que la situación de ahora sea "más difícil" que en junio, lo que ha llevado a endurecer el protocolo sanitario de los clubes. "Hemos obligado a cambios de protocolo y a extremar los controles. Nuestro protocolo es más complicado para evitar suspender partidos, que a fecha de hoy no hay ninguno suspendido. Eso requiere más trabajo, comunicación, un trabajo ímprobo", manifestó, y ejemplificó con el hecho de que se realizan test en los clubes "prácticamente todos los días".