múnich/parís - El Paris Saint-Germain intentará conquistar esta noche la primera Copa de Europa de su historia en la final que le enfrenta al siempre temido Bayern de Múnich, un equipo fiable y arrollador que pretende su sexto entorchado en la máxima competición continental.
De un lado Neymar y Mbappé, el fútbol más ostentoso de un proyecto plagado de petrodólares que ha tardado una década en pisar el escenario más envidiado del fútbol mundial. Del otro, un clásico europeo que llega a la pelea definitiva con el mejor de los avales: sus goles y la capacidad intimidatoria con sus rivales.
El equipo alemán vapuleó al Barça (2-8) en cuartos, hizo lo propio con el Chelsea en octavos de final, y pasó por encima del Olympique de Lyon en las semis. El potencial ofensivo representado en jugadores como Robert Lewandowski y la oportuna aparición de Gnabry o Kimmich están dando al Bayern un nivel superior.
Los jugadores de Hansi Flick, físicamente muy superiores al resto, son el segundo equipo más goleador en la historia de la competición (42 goles en 10 partidos), una cifra que marea a cualquier oponente, sobre todo cuando eres novato en la final. El Bayern, por contra, destaca por su experiencia y jugará la undécima de su historia -solo el Real Madrid ha jugado más que él-.
En sus filas todavía quedan cuatro supervivientes que ganaron la última Champions del conjunto bávaro, allá por 2013, ante el Borussia Dortmund. Se trata de Neuer, Muller, Boateng y Alaba, quienes ya saben lo que es triunfar levantando la orejona. Otros como los españoles Thiago Alcántara y Álvaro Odriozola también saben lo que es ganar con otros clubes.
El Bayern ha sido una máquina indestructible en el formato exprés. El equipo de Flick ha apoyado su exitoso camino en una sobria defensa, cero complicaciones en la fase de construcción y un interminable talento en los metros finales. Goretzka ha sido otra de las consolidaciones en el conjunto muniqués, además de Gnabry, que fue vital en las semifinales con un doblete.
Enfrente estará un PSG que -por fin- está a un partido del título más codiciado del planeta. Ni todo el dinero del mundo -más de 1.000 millones de inversión- han garantizado un éxito inmediato en la Champions. Una década después, el juguete del jeque Al-Khelaifi puede conquistar el título por el que compró el PSG.
El equipo de Thomas Tuchel dio en la clave para resolver los partidos pese a la inactividad de los últimos meses. Los franceses fueron los únicos que dejaron de jugar la Liga por suspensión y alargaron el parón más que el resto de clubes. Sin embargo, eso no ha sido impedimento para que acabasen con el Dortmund, el Atalanta y el Leipzig.
La superioridad no fue tal contra los italianos, pero el talento decantó la balanza a su favor en apenas 60 segundos. Ahora, con Neymar a un gran nivel y Mbappé renovando su hambre en cada jugada, el PSG tiene muchos argumentos para soñar con su primer título de la Champions. Un caramelo de difícil acceso que es mejor no dejar escapar.
keylor, duda por lesión La única duda en el PSG es la presencia del portero exmadridista Keylor Navas, que padece molestias en el gemelo y ya fue sustituido por Sergio Rico en cuartos y semifinales. El costarricense, sin embargo, se entrenó con el resto de sus compañeros en la previa. Sería la cuarta final de su carrera tras las tres que disputó y ganó con el Real Madrid.
El PSG también buscará conquistar el triplete, algo que sólo ha ocurrido ocho veces en la historia del fútbol. En esa misma tesitura está un Bayern que no presenta bajas, ni dudas, y está a un solo partido del segundo triplete de su historia después del conseguido hace siete años. Un partido que no sólo repartirá la nueva corona del Viejo Continente.
LA PREVIA
PSG Sergio Rico; Kehrer, Thiago Silva, Kimpembe, Bernat; Ander Herrera, Marquinhos, Paredes, Di María; Neymar y Mbappé.
Bayern MúnichNeuer; Kimmich, Boateng, Alaba, Davies; Thiago, Goretzka, Gnabry, Müller, Perisic; y Lewandowski.
Árbitro Daniele Orsato (ITA).
Hora/tv 21.00h. (Movistar Liga de Campeones).