- Aunque todavía no ha consumido su primera semana de trabajo de pretemporada, el Deportivo Alavés tenía ante sí el pasado fin de semana dos importantes partidos. Es verdad que la escuadra albiazul no estaba sobre el césped de La Romareda ni de Los Juegos Mediterráneos pero no lo es menos que, de manera indirecta, se jugaba mucho en ambas citas. Porque en esas semifinales del play off de ascenso a la Primera División estaban presentes dos jugadores del Glorioso actuando en calidad de cedidos en el Almería y en el Zaragoza. El guardameta Antonio Sivera en la escuadra andaluza y el extremeño Burgui en la aragonesa.

Más allá del lógico interes por conocer qué combinados avanzaban en el camino por convertirse en el último de los integrantes de la máxima categoría el próximo curso y, en consecuencia, adversario del cuadro de Pablo Machín, la entidad del Paseo de Cervantes estaba muy pendiente de lo que sucedía en esos cruces porque de su desenlace dependía en gran medida el futuro de sus futbolistas. En los contratos de cesión suscritos por ambos el pasado invierno se incluyó una clásula de compra obligatoria por sus nuevos equipos en caso de lograr el ansiado regreso a Primera.

Un objetivo que se antojaba factible puesto que tanto Almería como Zaragoza ocupaban plazas de ascenso directo en el momento de hacerse con sus servicios. El atípico discurrir de la temporada, sin embargo, relegó a los dos a la agónica lotería del play off. Lo que dejaba claro que, en el mejor de los casos, solamente uno saldaría con éxito su préstamo.

Ante la imposibilidad de lograr el pleno, ese era también el deseo de los responsables del club de Mendizorroza. Pero tanto los andaluces como los maños fracasaron en sus respectivos choques ante el Girona y el Elche y se quedaron el domingo a las puerta de la final. Como inevitable consecuencia la cláusula obligatoria quedó automáticamente anulada y ambos deberán reintegrarse a la disciplina albiazul.

Un regreso doblemente problemático para El Glorioso. En el plano deportivo se trata de dos jugadores que no entran demasiado en los planes de futuro de la entidad y, sobre todo, vienen a incrementar todavía más la excesiva nómina de jugadores con contrato en vigor. Pero probablemente donde más daño ha provocado la obligada vuelta de Sivera y Burgui es en la vertiente económica. Teniendo en cuenta el escenario de recesión, incertidumbre y recortes presupuestarios que ha dibujado en los últimos meses el coronavirus, poder obtener un pellizco por dos jugadores con los que no se cuenta se convierte en un tesoro que resulta muy duro dejar escapar. Y eso es precisamente lo que le ha sucedido al Alavés, que pierde una vía de ingresos extraordinarios que sin duda le habría venido bien para cuadrar el complicado presupuesto que debe elaborar.

En el caso de Sivera, además, su regreso a la disciplina gasteiztarra tiene también un efecto dominó con otras piezas. Tras el buen rendimiento de Roberto Jiménez durante la fase final del curso sustituyendo a Pacheco, la entidad del Paseo de Cervantes veía con buenos ojos la continuidad del guardameta madrileño, que actuó en calidad de cedido. Esa operación, sin embargo, estaba supeditada a la venta de Sivera. Una vez que esta se ha frustrado -al menos con el Almería como destino-, todo apunta a que Roberto tendrá que buscarse también un nuevo equipo en el que continuar demostrando sus condiciones.

Sivera. Se incorporó al Almería el pasado mercado de invierno buscando minutos de juego. A priori llegó al conjunto andaluz con el cartel de titular pero el entonces entrenador, José María Gutiérrez, Guti, le relegó al banquillo. Los sucesivos cambios en el banquillo rojiblanco tampoco le han concedido demasiadas opciones. Finalmente ha disputado seis encuentros, incluidos los dos del 'play off' ante el Girona, en los que ha encajado nueve goles.

Burgui. Abandonó el Alavés en febrero aprovechando una lesión de larga duración del Zaragoza. En el cuadro maño ha vuelto a sentirse importante tras pasarse casi todo el curso pasado de baja por lesión. Hasta caer eliminado a manos del Elche ha disputado diecisiete encuentros con los blanquillos, once de ellos como titular.

2021

En junio del año próximo concluyen los contratos de Sivera y Burgui con el Alavés, lo que sitúa al club en una situación delicada a la hora de afrontar su futuro.