DONOSTIA. El triunfo del corredor del Deceuninck-Quick Step se fraguó, como se preveía, en la subida al alto de Murgil Tontorra, una elevación con la carretera estrecha y retorcida, en la que cientos de aficionados se dan cita, y al que llegaron juntos los favoritos a la victoria muy cerca ya de meta.

Mikel Landa, que no se encontró bien en ningún momento de la jornada, había cedido antes, no así Alejandro Valverde -campeón mundial- o el colombiano Egan Bernal -vencedor del Tour- que se convertía así en el máximo aspirante a ganar en Donostia pero Evenepoel atacó antes. Se llevó durante algunos kilómetros para hacer hueco a Tom Skujins y lo dejó atrás a siete kilómetros de meta.

El grupo trató de dar caza a Evenepoel, pero el belga paladeaba ya el gran éxito y mantuvo el hueco a la bajada del puerto y en las calles de Donostia para alzar los brazos en solitario en la meta de la capital guipuzcoana.