Gap es una invitación a las fugas. En esta ocasión, la escapada fue muy numerosa. Omar Fraile y Gorka Izagirre se metieron en la misma, pero no pudieron frenar a Matteo Trentin, que demostró ser el más fuerte. Resolvió con contundencia. En solitario. Por detrás, el pelotón pensaba en los Alpes y en su terrible primera etapa, en la que deberán enfrentarse a tres grandes cimas que harán muchísimo daño por la altitud y por el calor. Ha llegado el momento de la verdad en el Tour. Landa, Pinot, Thomas y Bernal tienen que eliminar a Alaphilippe. Tendrán que hacer la carrera dura. Habrá movimientos de peones para intentar el asalto de los jefes de fila. El Izoard parece el punto clave para atacar y enlazar después con el Galibier. En este tipo de etapas de gran fondo y con puertos tan duros y tan altos, las diferencias pueden ser muy grandes. Será muy importante la estrategia y saber apoyarse en el equipo. En ese sentido, Landa puede contar con buenos corredores. Pinot, el mejor en la montaña, lo intentará sí o sí. Ha llegado su momento. Es el gran favorito para los franceses.