Geelong (australia) - Elia Viviani (Deceuninck) ha comenzado la temporada con el estruendo que producen las grandes explosiones. El esprinter italiano es un disparo en el arranque del año. Una detonación. Viviani, a cada campaña más poderoso al esprint, se impulsó en el Tour Down Under y en la Cadel Evans Ocean Road Race, otra carrera en Australia, dio de lleno en la diana. Lo hizo en un debate velocísimo frente a Caleb Ewan (Lotto), el escueto esprinter australiano, que mantuvo el pulso hasta que Viviani gritó su triunfo, el segundo en lo que va de curso. Richie Porte (Trek) trató de ovillar el esprint, pero en su pensamiento quedó en el aire. No funcionó su plan y la cita se resolvió del modo esperado. Desvanecido el ataque de Porte en la clásica de 164 kilómetros con salida y llegada Geelong, Viviani se dispuso a celebrar la victoria con la velocidad del rayo. El italiano se impuso a Ewan con solvencia tras alcanzar una velocidad punta de 75 kilómetros por hora. Viviani tiene prisa y en Australia hace caja. La competición continuará en tierras australiana con la disputa del Herald Sun Tour entre el miércoles y el domingo. Otro compañero de Viviani en el Deceuninck, Maximiliano Richeze, venció el critérium de la Vuelta a San Juan de Argentina tras batir a Quintana. - C. Ortuzar
