torrelavega - La etapa de hoy ha generado altas expectativas en Bizkaia. ¿Qué les llega a ustedes como organizadores?
-Nos llega eso también. Además, se trata de una etapa en el País Vasco muy atractiva para la gente. Además de ser un final en alto, muy exigente, es la primera vez que va acabar una etapa allí y será del gusto del público. Podremos ver batalla, mucha épica, y lo que esperamos es que haya mucho público y la carrera deje muy contenta a la gente.
Ya que habla del público, este, a diferencia de lo vivido en alguna etapa alpina del Tour, ha demostrado ser muy respetuoso. ¿Espera lo mismo de la afición vasca?
-Absolutamente. El comportamiento de la gente no solo es algo que hay que destacar, también agradecer. Este es un deporte de cercanía, sin contrarios, al margen de las preferencias de cada uno por uno u otro equipo o corredor. Ahora vamos al País Vasco, la parte del país que más afición tiene, también la que más entiende, la que más sabe. Por lo tanto, también la más respetuosa. Hoy podemos dar un gran ejemplo de ciclismo en todos los frentes. Desde el punto de vista del recorrido, en lo deportivo, desde el punto de vista paisajístico y, sobre todo, desde el punto de vista popular, porque vamos a la tierra que mejor afición tiene.
¿Qué le aporta la etapa de hoy a la Vuelta?
-Aporta dos cosas muy importantes. La primera es que podemos volver a estar en el País Vasco, que para mí es algo muy destacable. La segunda, que aporta una novedad a la Vuelta, un tipo de puerto que podríamos decir que es un poco diferente de los que suele haber en el País Vasco. Luego algo que a nosotros nos hacía mucha ilusión y también a la Diputación de Bizkaia, que es que hacemos una etapa íntegramente en Bizkaia. Una etapa que sale del mar y llega al interior, una etapa que pasa por la capital, por Bilbao, que siempre tantos buenos resultados y recuerdos trae a la Vuelta.
Una jornada que será especial para el Euskadi-Murias en el regreso de un un equipo vasco a la Vuelta cinco años después. ¿Considera que han cumplido con su objetivo con el triunfo de Óscar Rodríguez?
-Han aportado a la carrera en la medida de lo que pueden hacer, que es ganar etapas. Creo que es muy importante. Con la victoria de Óscar del otro día no solo me quedo con que ganó en La Camperona, me quedo quedo con cómo lo hizo. Desde luego, eso le tiene que dar moral a él y a todo el equipo para volver a repetir la hazaña hoy. Quien gane en el monte Oiz es algo que decidirá la carrera, pero si ganara alguien del Euskadi-Murias o cualquier corredor vasco eso haría ya que la efervescencia subiera a grados infinitos y sería un gran colofón para una gran etapa. Pero como director de carrera lo único que quiero es que haya emoción deportiva.
¿Regresará la Vuelta el próximo año a Euskadi?
-Voluntad hay. Pero esto es año a año. Yo creo que nos toca hacerlo muy bien este año para volver a repetir el que viene. Lo que sí te puedo decir es que la voluntad de la Vuelta existe. Ahora mismo las conversaciones abiertas que tenemos en el País Vasco nos hacen que sea muy posible que la Vuelta esté de nuevo en el País Vasco. Si no es el año que viene, el siguiente, pero soy muy optimista.