DEPORTIVO: Rubén Martínez; Juanfran, Schär, Eneko Bóveda, Luisinho; Guilherme, Mosquera (Muntari, min.82); Lucas Pérez, Fede Cartabia (Çolak, min.65), Adrián López; y Florin Andone (Borja Valle, min.89).
ESPANYOL: Diego López; Víctor Sánchez, Duarte, David López, Aaróna; Piatti (Jurado, min.73), Darder, Carlos Sánchez, Granero (Marc Navarro, min.80); Baptistao (Sergio García, min.68) y Gerard Moreno.
Árbitro: Fernández Borbalán, del colegio andaluz.
Estadio: Riazor ante 18.139 aficionados.
a coruña - La mala suerte se cebó ayer con el Deportivo (0-0) ante el Espanyol en el partido que abrió la jornada 25 de LaLiga, en el que estrelló dos balones en el poste y desperdició un penalti. El Deportivo fue más ambicioso, pero no pudo conseguir los tres puntos que ansiaba y ya son diez jornadas consecutivas sin ganar, mientras que el Espanyol lleva siete y ha empatado los cuatro últimos partidos del campeonato.
En el césped de Riazor se citaban dos equipos con dudas y con necesidad de cambiar sus dinámicas negativas, aunque las urgencias eran evidentemente mayores en los locales, que quisieron mandar pronto un mensaje a su rival con un disparo lejano de Mosquera, una de las tres novedades del once de Clarence Seedorf, que atajó Diego López en el primer minuto. El técnico deportivista decidió pasar a Krohn-Dehli, uno de los fichajes invernales, de la titularidad a la grada, y dejó en el banquillo al ghanés Sulley Muntari, que horas antes logró la documentación para formalizar su inscripción en LaLiga. - Efe