Bilbao - O Leire Olaberria, pistard de brillante currículum y 40 años, o Raúl Mena, seleccionador español de la especialidad. A dos semanas de la celebración del Mundial de la modalidad, esa parece la única solución posible después de la denuncia “por no cumplir con el criterio selectivo de carácter objetivo” interpuesta por la corredora guipuzcoana en contra el técnico vasco, que dirige el combinado estatal y que prefirió declinar ofrecer su versión del conflicto porque el mismo ha de ser resuelto por una instancia deportiva superior. De lo que el Comité de Competición y Disciplina de la Federación Española resuelva dependerá el futuro inmediato de Leire Olaberria y del seleccionador, Raúl Mena. “No tiene sentido que dé mi versión porque el tema está en el Comité de Disciplina”, expuso a este periódico el técnico del combinado de pista, que aguardará a la resolución del caso para “adoptar medidas oportunas si fuera necesario”. Será por tanto el ente federativo el juez que deberá resolver en los próximos días si da por buenos los postulados de la corredora, que entiende injusta o al menos desproporcionada “su exclusión de la selección”, o da por bueno el informe técnico realizado por el seleccionador exponiendo sus razones para decantarse por otras corredoras para afrontar la cita mundialista.
El conflicto entre ambas partes arrancó en la concentración previa a los campeonatos de Europa, en septiembre de 2017, meses después de que Leire Olaberria se convirtiera en madre. La corredora, una de la más brillantes pistards -la guipuzcoana ha sido bronce en la puntuación de los Juegos de Pekín 2008 y bronce mundial, campeona de Europa y ganadora de la Copa del Mundo de omnium-, recuperó la forma para competir y recibió la llamada del seleccionador, que la quería incluir para el equipo de madison, una prueba que se realiza por parejas. Durante los días de preparación en Mallorca surgió la disparidad de criterios entre la corredora y el técnico y el cisma que ha desembocado en la denuncia de la corredora. “El madison es una prueba en la que nos damos relevos en mitad de la pista a más de 50 por hora, requiere mucha compenetración y es muy difícil lograrlo con alguien que no tengas confianza suficiente. Pero Mena me dijo que no, que mi pareja tenía que ser otra corredora y no Eukene Larrarte, mi pareja habitual en la prueba”, expone Leire Olaberria a DNA.
La de Ikaztegieta no se encontraba cómoda con la compañera designada por el seleccionador, le faltaba feeling y así se lo hizo saber después de que ambas corredoras se fueran al suelo durante uno de los entrenamientos. La corredora quería ser competitiva y según su criterio no sumaban como pareja “Hablo del nivel de ambas. Si haces un esfuerzo, que siendo madre es más complicado porque tienes que compaginarlo con cuidar de tu hijo, al menos que sea por competir, no para estar perdiendo vuelta tras vuelta”, radiografía Olaberria. Raúl Mena, que es el único quien posee la autoridad y la capacidad de elección, no cedió ante las observaciones de la ciclista y mantuvo la apuesta. Desde entonces, Leire Olaberria no ha recibido ninguna llamada del seleccionador a pesar de que ella obtuvo sus logros deportivos en las pruebas de seis días. “No he tenido ninguna oportunidad desde entonces”, subraya Olaberria, que entiende injusta su exclusión porque según su opinión la decisión del técnico “no obedece a criterios deportivos”.
La acusación de la corredora también hace mención a “delitos de alteración de la competición, prevaricación y malversación de caudales públicos”. La ciclista de Ikaztegieta, que se ha quedado sin Copa del Mundo y no tiene plaza para el Mundial de pista que se disputará en Holanda a partir del 28 de febrero, cree a su vez que existe un conflicto de intereses porque el seleccionador también es director de un equipo de pista, el Euskadi-Eustrak, y según su criterio favorece a dichas corredores en las convocatorias de la selección. Cabe recordar que Leire Olaberria obtuvo el bronce olímpico en Pekín’08 formando parte del equipo que dirigía entonces Raúl Mena. Ahora, ambos se encuentran en trincheras enfrentadas a la espera de lo que resuelva el Comité de Competición y Disciplina de la Federación Española y zanje la polémica.