El 'rider' ceutí Regino Hernández logra la medalla de bronce en cross y se suma a los Fernández Ochoa

España sólo tenía en su palmarés el oro de Francisco Fernández Ochoa en eslalon, en Sapporo (Japón) en 1972, y el bronce de su hermana Blanca en la misma disciplina en Albertville (Francia) en 1992, pero el deportista español se unió a ellos tras una brillante actuación en el circuito de Phoenix Park donde sólo ha sido superado por el gran favorito, el francés Pierre Vaultier, y el australiano Jarryd Hughes.

El flamante medallista de bronce declaró este jueves, en Phoenix Park, que "es algo con lo que" ha "soñado toda su vida".

"Lo primero que pasa por mi cabeza es mi familia, la gente que ya no está aquí; y toda la gente que nos apoya día a día; y que lo da todo por nosotros, en un deporte tan duro como éste", indicó a Efe el ceutí de la federación andaluza en la línea de meta de Phoenix Park.

"Ha sido un día increíble, más contento no puedo estar. Da igual que sea bronce, plata u oro. Es una medalla olímpica"; explicó Regino.

"Es algo con lo que he soñado toda mi vida", apuntó a Efe el ceutí de la federación andaluza, que logró de esta forma la tercera medalla olímpica en toda la historia de España en unos Juegos de invierno, después de las que habían ganado con anterioridad los hermanos Fernández Ochoa, Francisco y Blanca, en esquí alpino.

"Ganar esta medalla, haciendo historia, además, es algo increíble", comentó a Efe Regino nada más ganar su medalla en Corea del Sur.

El guipuzcoano Lucas Eguibar, doble subcampeón el pasado año en Sierra Nevada y ganador de la Copa del Mundo de Boardercroos, ha sido eliminado en cuartos de final en los Juegos de PyeongChang al igual que el cántabro Laro Herrero.

Eguibar y Laro Herrero, acabaron en los puestos vigésimo sexto y trigésimo séptimo, respectivamente, en la calificación para la prueba de boardercross, por lo que al no entrar entre los 24 mejores en la primera bajada de una calificación que sirve sólo para elaborar el cuadro de las eliminatorias, tuvieron que afrontar, por ese motivo, la repesca.

El vasco 'Luki' -que había cometido un fallo que le hizo perder más de tres segundos en la primera bajada- cubrió, en su segunda bajada, los 1.277 metros del circuito surcoreano en un minuto, catorce segundos y 45 centésimas, inscribiéndose vigésimo sexto. El cántabro Laro (1:16.97) acabó la calificación en el puesto trigésimo séptimo.