Barcelona - El británico Lewis Hamilton (Mercedes) ganó ayer el Gran Premio de España de Fórmula 1, quinta prueba del Mundial, al vencer una reñida batalla táctica con Sebastian Vettel (Ferrari), segundo y que retiene el liderato del campeonato, con Daniel Ricciardo (Red Bull) tercero, mientras que Carlos Sainz (Toro Rosso) sumó más puntos con su séptima posición y Fernando Alonso (McLaren) logró terminar su primera carrera del año al ser duodécimo.

Hamilton y Vettel lucharon en un cara a cara intenso por un triunfo reñido que finalmente se llevó el piloto de Mercedes, que se benefició de un gran trabajo de equipo de Valtteri Bottas antes del abandono del finlandés. Pese a la resistencia del alemán de Ferrari, que defendió su posición al extremo, una mejor estrategia en boxes y en la elección de neumáticos permitió a Hamilton lograr su segunda victoria en el Circuit de Barcelona-Catalunya, tras la de 2014.

El triunfo del británico tuvo varias claves. La primera de ellas, la gestión de carrera del piloto y de Mercedes, pues, pese a perder la pole en una primera curva accidentada frente a Vettel, supo reponerse y alargó su primera parada al máximo para abrir hueco. Hamilton puso las gomas medias en su primer pit stop y dejó el otro set de neumático blando, el más rápido, para el final de carrera y poder asestar así el golpe definitivo a Vettel.

Y les salió bien la jugada pese a que el alemán, en su segunda parada en boxes en la vuelta 38, una más tarde que la segunda entrada de Hamilton para poner las blandas, logró aguantar la posición frente al británico. Fue una lucha preciosa cuerpo a cuerpo en la que Vettel defendió su interior y Hamilton, tras quejarse de una posible mala maniobra de su adversario -no sancionada por los comisarios-, pasó al alemán en el 44º giro.

El británico es el primer piloto de los últimos tiempos en lograr el doblete en Montmeló con una misma escudería. Lo logró Michael Schumacher con Ferrari en 2001, 2002, 2003 y 2004. Desde entonces, sólo Fernando Alonso (con Renault en 2006 y con Ferrari en 2013) y Kimi Raikkonen (con McLaren en 2005 y con Ferrari en 2008) habían repetido victoria.

Carlos Sainz se benefició de los abandonos de Bottas, Max Verstappen (Red Bull) y Kimi Raikkonen (Ferrari), así como de la sanción de 5 segundos a Pascal Wehrlein (Sauber) por no respetar los límites de entrada al pit lane, para ser octavo y sumar 6 puntos. Fernando Alonso, por su parte, despertó del sueño de lograr la séptima posición en la sesión de calificación y terminó duodécimo. - E.P.